Más Madrid quiere subvencionar el “ecohousing” compartido: casas verdes y comunas

Mónica García, la candidata de Más Madrid a la Presidencia de la Comunidad de Madrid el próximo 4M, tiene una solución para el problema inmobiliario madrileño: el “ecohousing”. Es más, si se puede dar paso a las comunas habitacionales, mejor. Porque su plan pasa por “modos diferentes de vivienda que tiendan al desarrollo de las relaciones y consumo comunitarios frente al individualismo”.

La medida aparece recogida en el programa de Más Madrid, el partido de Íñigo Errejón y Mónica Garcia. Y allí se señala el compromiso de favorecer “el modelo ‘ecohousing’ y modos diferentes de vivienda”. Porque su objetivo, por lo visto y para garantizar el “derecho a la vivienda” es el siguiente: “Favoreceremos el modelo ‘ecohousing’ y modos diferentes de vivienda que tiendan al desarrollo de las relaciones y consumo comunitarios frente al individualismo”.

La idea se ha convertido en una tónica dentro de los partidos de corte comunista. De hecho, en 2017, ya el segundo teniente alcalde de Madrid, Nacho Murgui, presentó sus ARTE-Factos: las ‘comunas’ en las que debían vivir madres solteras con ancianos bajo los principios de autogestión, huertos urbanos o feminismo. Y siempre bajo la óptica de consumos o convivencias colectivas.

Preguntado por OKDIARIO en aquel momento, el número dos en la lista electoral de Manuela Carmena aseguró que no eran «comunas». Según su versión, nunca había empleado el término para referirse a los ARTE-Factos, una palabra que «no es más que una caricatura de carácter propagandista interesada». Pero, lo cierto es que lo vecinos, los medios de comunicación, y, posteriormente, la líder de la oposición en aquel momento, Esperanza Aguirre, sí se refirieron con la palabra “comuna” al entonces proyecto de Ahora Madrid.

La «innovación social» de aquellos ARTE-Factos (acrónimo de actuación de reequilibrio territorial), se centraba en tres distritos, San Blas-Canillejas, Hortaleza y Carabanchel. Combinaban 87 viviendas públicas en régimen de alquiler sin derecho a propiedad con distintos equipamientos y espacios comunes en tres edificios sostenibles medioambientalmente. Murgui reconoció en aquel momento que experiencias similares no existían a esas alturas en la ciudad. Lo más similar eran la Torre de Vallecas, la Forja en Orcasitas o las corralas de siglos pasados, según los propios miembros de Ahora Madrid.

Lo novedoso de los ARTE-Factos era que, tanto las viviendas, como la parte de equipamientos estaban interrelacionadas. ARTE-Factos era, de ese modo, «un modelo innovador de infraestructura pública que establece una nueva relación entre lo privado, lo común y lo público», tal y como explicó el entonces delegado de Coordinación Territorial y Asociaciones, Nacho Murgui, flanqueado por las concejalas-presidentas de Hortaleza y San Blas, Yolanda Rodríguez y Marta Gómez Lahoz, respectivamente.

La idea parece volver ahora. Y lo hace para indicar a la población formas de vida “que tiendan al desarrollo de las relaciones y consumo comunitarios frente al individualismo”. Aunque a ese “individualismo” hay gente que prefiere llamarlo “privacidad”.