España
Cartas Bomba

El jubilado que envió ‘cartas bomba’ a Sánchez no es un fascista sino «un nostálgico de la URSS»

  • Luis Miguel Montero/ Ángel Moya

Pompeyo González Pascual, el jubilado de 74 años detenido la mañana de este miércoles en Miranda de Ebro (Burgos) como presunto autor del envío de seis cartas con artefactos explosivos, es un prorruso, nostálgico de la grandeza de la Unión Soviética y que apoya a Putin en la guerra contra Ucrania. Esa sería la principal motivación para haber mandado seis cartas a Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, Margarita Robles, ministra de Defensa, a la base de la OTAN en Torrejón y a la embajada de Ucrania en España. Todavía se investigan todas las posibles líneas para tratar de averiguar si el hombre actuaba en solitario o estaba apoyado por algún grupo. Aunque no se descarta nada no está probada ninguna adscripción política concreta. Los investigadores creen que la única motivación habría sido protestar por el apoyo de España a Ucrania en la guerra que le enfrenta con la Rusia de Putin.

Los investigadores no creen que el detenido sea un «loco», es más, le suponen una inteligencia por encima de la media y siempre inciden en que «sabía muy bien lo que hacía en todo momento». El hombre se maneja muy bien en todo lo relacionado con la tecnología. Las vinculaciones con una organización extranjera no están probadas todavía, pero tampoco descartadas a la espera del registro de su casa. Lo que sí parece probado hasta el momento es que Pompeyo era una persona solitaria, no tenía hijos y había vivido casi siempre en el piso 3º C de este edificio de la calle Clavel. Un edificio construido en 1987 con 20 vecinos en pisos modestos, el de Pompeyo apenas tiene 42 metros cuadrados. El hombre había celebrado el pasado 27 de diciembre su 74 cumpleaños, ya que nació en 1948. En su casa se encontró material explosivo para elaborar otros artefactos.

Pompeyo es seguidor del club de aeromodelismo de Miranda de Ebro y de varios canales de youtube, entre ellos «Sin Mentiras», un canal donde se da información de las ofensivas rusas en Ucrania. El canal está ubicado en Venezuela y se declara apolítico pero sus vídeos tienen como personaje central a Vladimir Putin y las operaciones del grupo Wagner en Ucrania. El hombre era muy activo en redes sociales y seguía también el boxeo y varios clubes de motociclismo.

El detenido trabajó en el Ayuntamiento de Vitoria hasta su jubilación, vivía solo, no tiene hijos y se considera que habría hecho solo las cartas pero no se descarta que haya sido ayudado por otras personas.

El unabomber español no parece responder al perfil difundido días atrás de un peligroso integrante del Movimiento Imperial Ruso, como señalaba el diario estadounidense The New York Times el pasado fin de semana, señalando fuentes de la inteligencia de Estados Unidos. La citada organización se define como un movimiento de ultraderecha y está incluida en el listado de organizaciones terroristas del Departamento de Estado norteamericano. Según el citado diario, varios miembros de este grupo habrían estado visitando España y el detenido parece ser prorruso y que no tiene antecedentes policiales.

En España ya se declararon aliados de Putin los partidarios de Pablo Iglesias. El ex líder de Podemos justificó la estrategia belicosa del ex agente del KGB y llegó a afirmar que Rusia, con la amenaza de invadir Ucrania, únicamente «defiende su seguridad y sus áreas de influencia como todos». Reconoce que Putin «no es el faro del proletariado», pero arguye que «defender la paz supone asumir que es lógico que Rusia no quiera bases estadounidenses cerca de sus fronteras», escribió el ex vicepresidente del Gobierno en un artículo publicado en la web CTXT.

Podemos mostraba así su rostro más favorable a Putin y a Rusia. Desde su fundación como partido político ha protagonizado numerosas muestras de colaboración. La hemeroteca no recoge ningún episodio en el que los de Pablo Iglesias no se hayan alineado con la antigua URSS. Hay que recordar también que el anuncio de la ministra de Defensa de España de enviar dos buques a Ucrania provocó la salida en tromba de cargos morados para defender al Gobierno de Moscú.

La causa está declara secreta y este jueves tomará declaración al detenido, previsiblemente, el juez Calama del Juzgado de Instrucción 4 de la Audiencia Nacional.