España
Polémica invitación del Colegio de Madrid

Montero ‘adoctrina’ a los abogados de Madrid: «Los hombres blancos heterosexuales controlan la riqueza»

Clamor contra el decano de los abogados de Madrid por llevar a Montero a dar una charla: «Lo que faltaba»

De la A la Z: el diccionario que necesitas para entender a Irene Montero en sus divagaciones feministas

  • Vicente Mateu
  • Portadista en OKDIARIO. Anteriormente fui redactor jefe de Política, Sociedad y Cierre en EL MUNDO; asesor del Gabinete de la vicepresidenta del Gobierno y ministra de la Presidencia y Administración Territorial Soraya Sáenz de Santamaría; redactor de El Independiente... Y extremeño a mucha honra.

Muchos letrados se habían quejado de la invitación de su Decano, José María Alonso, a la ministra de Igualdad, Irene Montero, para participar en el Foro de Justicia organizado por el Colegio de Abogados de Madrid. Y la dirigente podemita les ha cargado de razón al pedir una «justicia feminista» – «Los hombres blancos heterosexuales controlan la riqueza»- además de la habitual matraca de la «justicia patriarcal».

Ante la cara de perplejidad que se reflejaba en el rostro de los asistentes al Foro, el discurso de la ministra ha obligado incluso a su anfitrión a darle una somera lección de Derecho y explicarle que no hay justicia feminista ni machista, sino «justicia independiente».

Pero el asombro de los abogados madrileños ha alcanzado su punto máximo cuando han tenido que escuchar que «el reparto de la riqueza en el mundo está mayoritariamente en manos de hombres blancos heterosexuales». Y según la ministra «podríamos hablar mucho de esto».

El propio decano Alonso ha tenido que reconocer públicamente la «polémica y crítica» que ha provocado su invitación a quien destaca por sus constantes críticas al sistema judicial y recurre a argumentos como el de los «hombres blancos heterosexuales».

A la ministra han tenido que recordarle entre otras cosas los pilares de la Justicia, empezando por los derechos fundamentales y siguiendo con la presunción de inocencia y la «no inversión de la carga de la prueba». Cuestiones que desde el feminismo radical de la izquierda se soslayan no pocas veces.

De hecho, los asistentes han tenido que señalarle a Montero a modo de ejemplo la reforma de la Ley de violencia de género o la del aborto, la nueva ley de trata o de las garantías de libertad sexual, la famosa ley del «sólo sí es sí».