España

Los inversores de EEUU trasladan a Sánchez su temor a que derogue la reforma laboral y limite el alquiler

El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, se ha visto en la necesidad de calmar a los responsables de los fondos de inversión con los que se ha visto en Nueva York este miércoles, quienes le han trasladado sus temores a que el Gobierno español pueda derogar la actual reforma laboral o que impongan una ley de la vivienda que limite los precios del alquiler, medidas que afectarían a sus inversiones en España.

Como parte de la ruta por Estados Unidos que Sánchez ha emprendido esta semana -que le lleva a Nueva York, Los Ángeles y San Francisco, pero no a Washington-, el presidente se reunió este miércoles con representantes de más de una docena de fondos de inversión y bancos norteamericanos con intereses en España, incluyendo como figura más destacada al líder de BlackRock, Larry Fink. Este fondo cuenta con participaciones en varias empresas del Ibex 35.

Pues bien, Sánchez ha podido escuchar en primera persona las reservas que estos inversores, de capital importancia para los intereses españoles, albergan sobre las reformas y medidas que el Ejecutivo socialcomunista ha venido anunciando durante los últimos tiempos. Estos fondos y bancos le han preguntado directamente a Pedro Sánchez por los planes que su Gobierno tiene en cuanto a la derogación de la reforma laboral, una ley de la vivienda que pudiera limitar los precios de los alquileres, o la reforma de las pensiones.

Mensaje de «tranquilidad»

Ante la inquietud mostrada por los inversores estadounidenses, Sánchez se ha visto en la necesidad de esmerarse para transmitirles «tranquilidad», pero advirtiéndoles de que España va a entrar en un «período de reformas muy intenso». Sánchez ha hecho hincapié en que cuenta con la estabilidad política necesaria para llevar a cabo sus reformas, aunque gobierne en coalición y con un apoyo minoritario en el Congreso. «Hasta ahora, hemos podido sacar adelante todas las reformas que nos hemos propuesto», ha presumido Sánchez tras la reunión con los inversores, poniendo como ejemplo las gestiones para sacar adelante los Presupuestos Generales. Ha reconocido que «la estabilidad y la certidumbre son muy importantes para la inversión extranjera».

En cuanto a los movimientos que planea, ha explicado Sánchez que «no solo vamos a reformar el sistema con las inversiones públicas, sino que vamos a cambiar el marco legislativo», mencionando, por ejemplo, la reforma fiscal, o las relativas al avance en transición ecológica y digitalización de la economía. Sánchez ha defendido además que la economía española es una de las que más rápido va a crecer en los próximos meses «en el mundo desarrollado», gracias también a esas reformas legislativas que preocupan, no en el mejor de los sentidos, a los norteamericanos, y a los fondos públicos que el Gobierno va a recibir, en el marco del Plan de recuperación.

Pedro Sánchez seguía su ruta de entrevistas con medios estadounidenses tras las cuales se desplazó hasta el icónico edificio Chriysler, en pleno centro del distrito de Manhattan, para inaugurar la nueva Oficina Económica y Comercial de España, en donde ha vuelto a defender que la economía española ya está en marcha y las buenas perspectivas que vaticinan los indicadores. «Estamos satisfechos por los logros conseguidos, y podemos mirar al futuro», ha afirmado.