España
CAOS FERROVIARIO

La Guardia Civil busca a ladrones «de poca monta» por el robo que Puente sigue considerando sabotaje

El caso lo investigan los especialistas en robos de la Guardia Civil

El robo guarda similitudes con otras sustracciones de cable en las vías férreas de España

Los ladrones se llevaron el cable de cobre para revenderlo a 10 euros el kilo

La Guardia Civil busca a un grupo de ladrones «de poca monta» por el robo de los cables de cobre de la línea del AVE Madrid-Sevilla, frente a la teoría del sabotaje que esgrime el ministro de Transportes, Óscar Puente. Hasta ahora, se investiga un robo porque los ladrones se llevaron el cable, porque el modus operandi es similar al de los cientos de robos que sufre la infraestructura ferroviaria al año, especialmente en Castilla-La Mancha, y porque el robo sólo implicaba un pequeño retraso de los trenes, no el cese del tráfico ferroviario.

Fue la rotura de la catenaria, en otro lugar diferente, lo que sí desató el caos en los trenes del pasado día 4. Una incidencia que se investiga en un partido judicial diferente, de carácter accidental y de la que se culpan mutuamente el Ministerio de Transportes y la compañía ferroviaria Iryo.

La unidad de la Guardia Civil que investiga el robo del cableado que Puente insiste en llamar sabotaje, es precisamente la de los especialistas en robos de la Policía Judicial de Toledo. De tratarse un sabotaje, los Servicios de Información del Instituto Armado se harían cargo del caso, algo que no ha ocurrido.

La autoridad judicial tampoco ha abierto una investigación de oficio por el presunto sabotaje, se limita simplemente a esperar que la Guardia Civil le pase las diligencias de los hechos que hasta ahora investigan como robo para iniciar el proceso judicial.

400 robos de cable en Castilla-La Mancha

Los ladrones se llevaron aproximadamente 150 metros de cable cuya función es sensorizar las vías. Frente a las mafias del robo de cable de cobre en vías ferroviarias que se llevan grandes cantidades, otros grupos se llevan pequeñas cantidades de cableado, del que les sea más fácil robar y revender en chatarrerías dada su elevada demanda. En Castilla-La Mancha se registraron 400 robos de cable de cobre en la infraestructura ferroviaria durante el año pasado.

Fuentes del caso explican que el modo en que se produjeron los cinco robos es similar al de otros robos de cable en la infraestructura ferroviaria. Los ladrones rompen la valla en varios puntos cercanos, en este caso en un radio máximo de 10 kilómetros, y roban todo el cable que pueden. En este caso el cable que une la vía con los cajetines que supervisan que no haya obstáculos en la vía.

Se llevaron lo que tenían más a mano, sin un gran despliegue, un robo detrás de otro del mismo cableado para rentabilizar la sustracción, como suelen hacer en zonas aisladas y sin vigilancia. Luego se marcharon con el botín por los caminos rurales que conocen.

Los guardias investigan las cámaras de tráfico de la vías cercanas al lugar del robo que tuvo lugar en la tarde del día 4 de mayo. Mientras Renfe no ha puesto la denuncia correspondiente hasta el día 6 de mayo. Entre tanto, ningún juzgado ordenó investigar a la Guardia Civil, que inicio sus propias diligencias por robo de cableado, no por sabotaje.

El robo produjo retrasos en la circulación ferroviaria pero lo que desató el caos fue la rotura de la catenaria. El ministro Puente acusa a la compañía ferroviaria Iryo de arrastrar la catenaria y romperla por accidente. Iryo desmiente al ministro y asegura que su tren estaba parado y la catenaria se descolgó.

Ahora, la Guardia Civil especialista en robos investiga la sustracción del cable y la justicia también. El partido judicial de Orgaz (Toledo) investiga el robo del cable de cobre de las vías. El partido judicial de Illescas (Toledo) se ocupa del supuesto accidente con la catenaria.

Puente ya llamó sabotaje a otro robo

El colapso de Rodalies en las elecciones catalanas no fue un sabotaje como también entonces sostuvo Óscar Puente. «No afirmo que haya sabotaje, pero no lo puedo descartar», dijo el ministro de Transporte y Movilidad Sostenible horas después de los comicios en Cataluña el pasado 12 de mayo de 2024.

Todo apuntaba a un robo Puente manifestó: «Me llamó mucho la atención que ayer los Mossos sin haber entrado en los túneles donde se produjeron los incendios ya tuvieran una conclusión, dijeron que descartaban el sabotaje. Nosotros no podemos afirmarlo, pero no podemos descartarlo. Es difícil sostener que fuera un robo de cobre, tiene otra apariencia. ¿Es sabotaje? No lo sabemos. ¿Descartarlo? No podemos».

Sólo doce días después, los Mossos desmantelaron la banda de ladrones que robó el cable de cobre provocando el colapso de los trenes de cercanías de Cataluña.

El Gobierno acusa de «hacer daño»

El discurso de Óscar Puente se encuentra respaldado por el del Gobierno, donde si bien eluden hablar directamente de «sabotaje» como ha hecho el ministro de Transportes, sí deslizan que «no se descarta ninguna hipótesis» en la investigación de la Guardia Civil sobre el caos ferroviario.

Así lo ha afirmado la portavoz gubernamental Pilar Alegría al ser cuestionada si se trató de un robo de cable cometido por delincuentes o un boicot a la infraestructura ferroviaria. «Había una clara voluntad de hacer daño», ha sostenido la también ministra Alegría en su comparecencia de este martes tras el Consejo de Ministros.