Desprecio de Armengol a Felipe VI: rehúye el «¡Viva la Constitución, viva el Rey!» que sí empleó Batet

La presidenta del Congreso de los Diputados, la socialista Francina Armengol, ha evitado este miércoles proclamar un «¡Viva la Constitución, viva el Rey!» ante Felipe VI como sí hizo en la apertura solemne de la anterior legislatura su antecesora en el cargo y compañera de filas, Meritxell Batet.

Este desprecio de Armengol se ha producido con motivo de la sesión de apertura de la XV legislatura celebrada en el Congreso de los Diputados, donde la tercera autoridad del Estado ha tomado la palabra justo antes del discurso de Felipe VI.

Armengol ha concluido su polémica intervención -muy criticada por la oposición por su carácter partidista al servicio de Pedro Sánchez- de esta manera: «Diputadas y diputados, senadores y senadoras, vayamos adelante con esta legislatura, que sostendrá las tormentas y las alegrías a las que se enfrenten la sociedad y nuestro país. Caminemos con esperanza y optimismo hacia ese futuro mejor y más justo que está en nuestra mano. Muchísimas gracias». El discurso ha concluido sin recibir el aplauso ni del PP de Alberto Núñez Feijóo ni de Vox, que han permanecido de brazos cruzados. Tras ser aplaudida por los suyos, los comunistas de Sumar y los nacionalistas del PNV, Armengol ha cedido el turno a Felipe VI diciendo simplemente: «Majestad, las Cortes Generales esperan sus palabras, muchas gracias».

Batet defendió la Monarquía

En cambio, Batet, a la que sí aplaudió el PP de Pablo Casado en la sesión solemne del 3 de febrero de 2020, concluyó así su discurso de apertura de la XIV Legislatura: «Como expresión de ese carácter común y compartido de nuestra Monarquía, quiero terminar mi intervención como presidenta del Congreso de los Diputados, con un voto nacido del respeto y la mayor consideración por vuestra función, vuestra función institucional y el desempeño de vuestra tarea. Por eso, con toda la solemnidad de esta ocasión y la representatividad que el cargo me confiere, les digo: ¡Viva la Constitución y viva el Rey!», expresó Batet dirigiendo la mirada hacia Felipe VI en un gesto de cortesía y complicidad. Las palabras de Batet fueron correspondidas por el hemiciclo con un «¡Viva!».

Batet renunció a su acta de diputada el pasado mes de septiembre y abandonó la primera línea política en un gesto interpretado por muchos como la negativa a transigir con determinadas decisiones de Armengol que suponen un ataque a la institucionalidad y al Estado de Derecho. Ahí están los ejemplos de la imposición de las lenguas cooficiales sin consenso o la tramitación de la ley de amnistía a los golpistas del 1-O que la Cámara rechazó tramitar por ser inconstitucional en la etapa de Batet. Por su parte, Armengol ha defendido hoy que gobernar con los separatistas es «legítimo».

Este miércoles, como el propio monarca ha indicado en su discurso, era la tercera vez que participaba en una apertura de legislatura como la de hoy, puesto que en la XIII legislatura no llegó a formarse gobierno y tuvo que disolver las Cortes. En cambio, en la que sí participó fue en la de la XII legislatura, la celebrada el 17 de noviembre de 2016 tras la investidura de Mariano Rajoy como presidente del Gobierno. En esa ocasión, la entonces presidenta de la Cámara, Ana Pastor, no pronunció un «¡Viva el Rey!», según la señal institucional de aquella jornada.