España

Cinco años de cárcel para el ex marido de Mónica Oltra por abusar de una menor

La Audiencia Provincial de Valencia ha vuelto a condenar, tras repetir el juicio, a cinco años de prisión al ex marido de la vicepresidenta del Gobierno Valenciano Mónica Oltra por un delito de abuso continuado con prevalimiento de una menor tutelada por la Generalitat. La ex pareja de Oltra, Luis Eduardo R. I., trabajaba en el centro en el que se produjeron los abusos y estaba a cargo de la víctima durante el turno de noche.

Según la sentencia, a la que ha tenido acceso OKDIARIO, como acusaba la Fiscalía resulta probado y que la menor se hallaba tutelada por la Generalitat en un centro donde trabajaba como educador Luis Eduardo R. Dicha menor, durante determinados periodos de tiempo en el año 2.016 y principios del año 2.017 y como consecuencia de que llegaba tarde al centro, tenía mal comportamiento o no cumplía con la normativa del mismo, era castigada frecuentemente a dormir en una habitación separada, ubicada en el primer piso de la residencia y alejada varios metros del “hogar” en que pernoctaban el resto de menores acogidos.

Explican los magistrados que fue entonces cuando el ex marido de Mónica Oltra, que desempeñaba el turno de noche en aquella época, acudía a la habitación de la menor, «entre dos y diez ocasiones, cuando esta se hallaba castigada, teniendo la misma dificultad para conciliar el sueño por sus miedos por lo que reclamaba la presencia del educador e incluso le pedía que le hiciera una masaje pues confiaba en el mismo, procediendo el mismo a masajearle en la zona del cuello y la espalda y, una vez creía que se hallaba dormida, cogía la mano de la niña y se masturbaba con ella fingiendo la menor dormir ante la vergüenza que le producía dicha situación».

En cuanto a la declaración de la menor, que se prestó en el primer juicio, dice el fallo que «debemos descartar móviles espurios o de resentimiento en víctima hacia el acusado, así como cualquier tipo de alteración personal o psicológica en la misma que arroje alguna duda sobre su credibilidad al tiempo de su exploración en fase de instrucción o en su declaración ante este Tribunal». Es más, añaden que, «el propio acusado manifiesta que la relación con la menor era buena, no ofreciendo dato alguno que permita sostener algún ánimo de resentimiento o venganza hacia el mismo capaz de enturbiar la credibilidad» de la joven.

Los magistrados añaden que, en cuanto al hecho de que la menor no reaccionara a los abusos, la explicación que da la propia perjudicada de que se quedaba como en shock y que pensaba que nadie la iba a creer se nos antoja como plausible teniendo en cuenta, por un lado, las propias circunstancias de la menor y, por otro, «la ascendencia que el acusado podía desplegar sobre la niña», en referencia a que en aquella época Mónica Oltra era su mujer.