GIRA POR CHINA

China desmiente a Sánchez y dice que éste apoyó a Xi Jinping por su plan de paz para Ucrania

Las palabras de Sánchez colisionan con la posición común de los países miembros de la UE y EEUU

El vídeo de Sánchez felicitando a Xi Jinping por su «reeleción» como dictador que Moncloa quiso ocultar

Xi Jinping Sánchez
Pedro Sánchez y Xi Jinping.

O Pedro Sánchez no se explicó bien ante Xi Jinping, o el gobierno chino no le entendió bien. El comunicado oficial del Ministerio de Asuntos Exteriores de China desmiente cuanto ha dicho Sánchez sobre el plan de paz para Ucrania. En España y en Bruselas, el presidente español siempre ha dicho defender el plan de paz de Volodímir Zelenski, pero según la nota oficial china emitida tras la reunión del pasado viernes entre ambos dirigentes, Sánchez “evaluó positivamente el documento de posición de China sobre la solución política de la crisis de Ucrania y apreció el papel constructivo de China en la solución política de la crisis de Ucrania”.

Quizás Sánchez trató de hacer un ejercicio de malabarismo diplomático con las autoridades chinas, pero si en el campo de la física es imposible soplar y sorber a la vez, en el ámbito de la diplomacia no sólo es también imposible sino que es además contraproducente.

En primer lugar, porque como aparece reflejado en el comunicado Sánchez no fue lo suficientemente claro en sus palabras como cabría esperar, dando pie a que la contraparte china incluyera en su nota algo que el español también acabó diciendo, esto es, su apoyo al documento de paz de China y a la diplomacia del gobierno chino, una diplomacia más asertiva desde que levantó a finales del 2022 las restrictivas políticas contra la pandemia.
Por otro lado, las palabras de Sánchez ponen en contradicción la actitud española con la del resto de países miembros de la UE y la de incluso EEUU.

Más bien, esas declaraciones sitúan al Gobierno español más cerca del discurso del presidente ruso, Vladimir Putin, que al del resto de países que han salido a apoyar a Ucrania en todo momento. De hecho, fue el propio dirigente ruso quien hace dos semanas tras recibir al presidente chino, Xi Jinping, valoró sus esfuerzos pacificadores en Ucrania y dijo que la propuesta de paz china era un buen punto de partida.

Putin le dijo a Xi Jinping que deseaba discutir su plan de paz. “Hemos estudiado detenidamente sus propuestas del plan de paz sobre resolver la aguda crisis de Ucrania. Por supuesto que tenemos una oportunidad de debatir estas cuestiones. Sabemos que se guía por la observación de los principios de justicia y respeto a los fundamentos del derecho internacional y seguridad indivisa para todos los países”, le dijo Putin.

El papel de EEUU

Sin embargo, el gobierno estadounidense ni ha apoyado, ni ha valorado positivamente, ni ha alabado ningún esfuerzo chino sobre Ucrania. Es más, el secretario de Estado estadounidense, Anthony Blinken, sostuvo hace diez días que “el mundo no debe dejarse engañar” por la propuesta china que “congelaría” en su lugar el territorio ya ocupado por las fuerzas rusas, como son buena parte del Donbás, Crimea y el puente terrestre que une ambas regiones como la castigada Mariupol como principal enclave.

El presidente Sánchez, por tanto, no fue lo suficiente claro y rotundo con su homólogo como hubiera sido de esperar y desear, lo que según algunos analistas es un riesgo para la posición común europea ante los desafíos geopolíticos en el segundo semestre del año en que Sánchez ejercerá como presidente rotatorio de la UE y donde tendrá que hablar con otros dirigentes internacionales sobre cuestiones relevantes del ámbito geopolítico.

En febrero Pekín expuso sus propuestas encaminadas a para poner fin a la guerra en Ucrania con un plan de doce puntos que aunque defiende la soberanía de todos países, no dice específicamente nada sobre Rusia, ni tampoco nada sobre retirar sus tropas de Ucrania. Condena el uso de sanciones unilaterales contra Moscú, lo que supone una crítica implícita a los aliados occidentales de Ucrania. Igualmente se hace un llamamiento para el establecimiento de corredores humanitarios que permitan la evacuación de civiles, así como otros para garantizar la exportación de grano. El plan chino prevé el fin de la mentalidad de la Guerra Fría, un término se entiende que se refiere al dominio mundial de EEUU.

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