España
Investidura Pedro Sánchez

Bildu desnuda a Sánchez: «Tenemos una interlocución normalizada desde hace años»

Desde el partido de Arnaldo Otegi se afirma que negar la relación es "política ficción". Ponen varias condiciones a Pedro Sánchez, entre ellas, que reconozca el "derecho a decidir".

  • Luz Sela
  • Periodista política. En OKDIARIO desde 2016. Cubriendo la información del Congreso de los Diputados. Licenciada en Periodismo por la Universidad de Santiago de Compostela. Antes, en COPE, ABC Punto Radio y Libertad Digital.

El Gobierno niega que existan contactos con EH Bildu para la investidura. Sin embargo, la ecuación que contempla el Ejecutivo socialista para que Pedro Sánchez pueda ser investido pasa, inevitablemente, por la formación de Arnaldo Otegi. Los contactos para esa investidura, aseveran desde esta organización, efectivamente no se han producido. Sin embargo, y pese a los intentos de La Moncloa por camuflar esas relaciones, se destaca que la interlocución entre PSOE y Bildu está «normalizada desde hace años».

Así lo asegura el diputado Jon Iñarritu, en una entrevista en El Correo, en la que advierte a Sánchez sobre sus condiciones para apoyar la votación en el Congreso, cuya fecha se comunicará este martes.

«Política ficción»

Iñarritu desmonta el escenario que ahora pretenden trasladar los socialistas y asegura: «Decir que los socialistas no hablan con EH Bildu es política ficción». «La propia Idoia Mendia dijo hace poco que ya habían pasado los tiempos de los vetos y las líneas rojas. La pregunta es por qué ahora el PSOE nos criminaliza y estigmatiza volviendo a lecturas del pasado que están más que superadas», explica.

Preguntado sobre el motivo por el que desde La Moncloa se rechazan los contactos, lo atribuye a que «hasta este momento parece que ha estado buscando la abstención por activa o por pasiva de Ciudadanos para no depender de los votos del independentismo de izquierdas. «Sería de sentido común que se sentara con nosotros sin excluirnos y hable de qué propósitos tiene para la legislatura», insiste. «Lo que no puede olvidar Sánchez es que si está ahí es gracias, entre otros, a EH Bildu».

Pese a condicionar la investidura, desde Bildu se muestran favorables a un acuerdo porque, opina el parlamentario, «si hay voluntad política hay suficientes fórmulas cara a cualquier tipo de compromiso».

‘Derecho a decidir’

«Está en manos de Sánchez y del PSOE ver qué postura podemos tomar nosotros», prosigue, «si es el Pedro Sánchez del diálogo y de la negociación o es el del 155».

Bildu, asevera, no dará un «cheque en blanco». Pero tampoco habrá «bloqueo». Su prioridad es que «las derechas no gobiernen en el Estado». 

Sobre sus exigencias a Sánchez, Iñarritu recuerda que su formación comparte «tres principios básicos» con ERC: «La defensa de los principios sociales, el reconocimiento del derecho a decidir y la defensa de las libertades y derechos civiles».

«Y eso tiene que ver con la anormalidad de que todo el gobierno catalán esté en la cárcel o en el exilio, y con que 8 años después del cese de la violencia de ETA estemos hablando de acercamientos a cárceles próximas a Euskal Herria cuando eso tendría que estar mucho más avanzado», asevera.

En relación a los tira y afloja entre PSOE y Podemos, opina el diputado que «está claro que están jugando una partida de póquer» aunque desconoce «qué cartas tiene cada uno».

Por ello, no descarta que, finalmente, se llegue a unas nuevas elecciones -«está dentro de la ecuación»- aunque a continuación afirme también que esa opción le parece un «sinsentido».

«No es posible la conformación de un Gobierno alternativo a las derechas dejando a EH Bildu fuera de la ecuación. Quien piense lo contrario no fue a clase de matemáticas o no está buscando con sinceridad un acuerdo», reitera.

Preguntado por el proyecto de reforma del Estatuto de Guernica, sobre el que actualmente trabaja y que recoge el concepto de ‘Nación vasca’, así como un referéndum «declarativo y habilitante» entre la ciudadanía, afirma que «hay que abordar todos los pasos para demostrar dónde está o no la voluntad del Estado» para llevarlo a cabo.