Hacienda acusa a Carmena de estar en rebeldía fiscal desde su llegada al Ayuntamiento

La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, está forzando un enfrentamiento con Hacienda que le puede salir muy caro. El documento de intervención, al que ha tenido acceso OKDIARIO, detalla no sólo toda una colección de trampas fiscales, sino que desvela que esta situación se lleva produciendo, literalmente, desde la llegada de Manuela Carmena al Ayuntamiento de Madrid.

En una de las frases, Hacienda destaca que “el Ayuntamiento de Madrid, ya incumplió en el ejercicio 2015 la regla de gasto al haber rebasado su techo en la liquidación por un importe superior a los 16,9 millones de euros”. Acto seguido, asegura que «durante el ejercicio 2016, se ha incumplido nuevamente la regla de gasto, al superarse en más de 233 millones de euros con respecto a los límites previstos legalmente”.

Y en «ambos casos el Ayuntamiento, desde la liquidación de 2015, no cuenta con un Plan Económico-Financiero válido aprobado por este órgano de tutela financiera”. Por este motivo, argumenta el departamento que dirige Cristóbal Montoro, el del «incumplimiento sucesivo y acumulativo de la regla de gasto en los ejercicios 2015 y 2016”, el Ayuntamiento de Madrid “se encuentra en el ámbito del Art. 25.1 a) de la Ley Orgánica de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera (LOEPSF), lo que habilita a este Ministerio para realizar un seguimiento específico e imponer medidas coercitivas sobre esa administración”, aclara el ministerio.

Desvío de 800 millones de euros

Hacienda desvela que “como consecuencia de ello, el 5 de abril de 2017, la Secretaría General de Financiación Autonómica y Local solicitó la remisión de Acuerdo Plenario de adopción de acuerdos de no disponibilidad de créditos por importe de 238.327.541,70 euros, debido al desvío de la senda de gasto puesto de manifiesto en las liquidaciones de los presupuestos 2015 y 2016, sin la oportuna cobertura de un Plan Económico Financiero que corrija dicha desviación”.

En resumen, que Manuela Carmena vive en la más absoluta rebeldía fiscal. Diga lo que diga su concejal Sánchez Mato. Una explicación que encaja con toda la colección de trampas descubiertas en las cuentas de la alcaldesa.
Unas trampas que, como ha adelantado OKDIARIO, se resumen en las siguientes:

1. La “adquisición del edificio sito en la calle Alcalá 45 por valor de 104 millones de euros”.
2. La “ejecución de sentencias y resoluciones judiciales firmes para las que no existía una previsión de créditos en el presupuesto del año 2016 por valor de 101,3 millones de euros”.
3. El “incremento del empleo no financiero de la Empresa Municipal de Vivienda y Suelo de Madrid, que implica formación bruta de capital por un valor aproximado de 70,4 millones de euros”.
4. El “coste de ruptura de las amortizaciones anticipadas de los préstamos a tipo fijo por valor de 1,8 millones de euros”.
5. La ejecución obligatoria “de gastos financiados con ingresos de particulares por importe de 6,5 millones de euros”.
6. La “prestación de servicios derivados de la ejecución de competencias impropias que deberían ser prestadas por las Comunidades Autónomas o el Estado por valor de 428,46 millones de euros”.
7. La “pérdida de ingresos derivados de las exenciones que la legislación estatal establece con carácter obligatorio sobre determinados tributos municipales por valor de 75,4 millones de euros en el ejercicio 2016”.

La suma de todas estas partidas supone casi 800 millones de euros. Una barbaridad de cifra sobre la que el Ayuntamiento se ha negado a adoptar medidas de reconducción que satisfagan los criterios que sí cumplen el resto de municipios de España.