Economía
se une a la luz

Tormenta energética: el precio del gas también cierra en récord histórico este martes en 130 €/MWh

Tormenta perfecta energética. Además de la electricidad, que marcará precio récord en España este miércoles, 291 €/MWh, el gas también ha cerrado en precio récord al marcar 130,5 euros por megawatio hora (MWh) este martes. Es el precio más caro de la historia, motivado entre otras cosas por la amenaza rusa de invadir Ucrania, cuyas consecuencias para España son terribles en medio de un incremento del consumo este invierno, la falta del gasoducto del Magreb, y la subida del consumo de gas para generar electricidad, lo que hará que la luz siga su escalada alcista.

El precio del gas amenaza la recuperación de España y añade más incertidumbre sobre las opciones de una falta de este tipo de energía en invierno. Las reservas en España son menores que hace justo un año para afrontar el crudo invierno, y las previsiones de Enagás de consumo de esta energía para el invierno han aumentado en un 15% para el mes de enero.

Menos reservas y más consumo que se suman a la falta del gasoducto del Magreb, cerrado por el Gobierno argelino el 31 de diciembre, que nutría a España del 20% del consumo anual. Esa falta de abastecimiento deberá ser sustituida por Gas Natural Licuado (GNL), que llega en barcos, pero cuyo precio es mayor y, además, la competencia para comprarlos a nivel mundial es muy grande por la demanda asiática.

El círculo vicioso energético se completa con la necesidad del gas para generar electricidad en España, que ha apostado por acelerar el cierre del carbón y las nucleares. El peso del gas en el mix energético se situó este lunes en el 35%, superando la cifra de noviembre.

Más caro

La consecuencia de esa necesidad de comprar gas para generar electricidad implica la subida del precio de la luz en el mercado mayorista, puesto que es la energía más cara y es la que marca el precio final en muchas ocasiones -la última energía que entra para cuadrar oferta y demanda es la que fija el precio definitivo-.

El coste de esta tormenta energética para los ciudadanos es evidente. El gas será más caro en invierno y la luz, también. Eso elevará la inflación y retraerá el consumo, lo que tendrá su efecto inmediato en la actividad económica nacional. El Gobierno insiste en que España liderará en 2022 el crecimiento europeo, pero lo cierto es que numerosas entidades nacionales e internacionales han revisado a la baja sus previsiones para este año y el próximo.