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El mes de marzo de 2025 trae consigo una noticia esperada por millones de jubilados y pensionistas en España: la aplicación definitiva del incremento en las pensiones aprobado por el Gobierno. Con el objetivo de garantizar que las prestaciones no pierdan poder adquisitivo frente al aumento del coste de vida, la Seguridad Social ha establecido una subida basada en la evolución del Índice de Precios de Consumo (IPC).
Uno de los cambios más significativos que se materializará en marzo de 2025 es el aumento de las pensiones mínimas por encima del IPC. Esta medida se enmarca en una reforma que pretende que las pensiones mínimas contributivas alcancen, como mínimo, el 60% de la renta mediana de un hogar compuesto por dos adultos en 2027. Bajo este criterio, la pensión mínima de jubilación para personas con cónyuge a cargo experimentará un incremento progresivo. En 2025, se establecerá en 15.786,4 euros anuales, lo que equivale a 1.127,60 euros al mes. Para aquellos que viven solos, la pensión mínima será de 12.241,6 euros anuales.
Subida general de la pensiones en 2025
En marzo, las pensiones contributivas en España experimentarán un aumento del 2,8%. Esta revalorización responde a la inflación registrada en el año anterior y tiene como objetivo evitar que los pensionistas pierdan poder adquisitivo.
Con este incremento, la pensión media pasará de 1.260,93 euros mensuales a 1.296,23 euros, lo que representa una subida de 35,30 euros al mes. En el caso de la pensión media de jubilación, esta aumentará en 40,56 euros, pasando de 1.448,77 euros a 1.489,33 euros al mes. A nivel anual, esto supone unos ingresos totales de 20.850,69 euros para un jubilado promedio.
En cuanto a otras modalidades de pensiones, las subidas serán las siguientes:
- Incapacidad permanente: de 1.165,60 euros a 1.198,24 euros mensuales (+32,63 euros).
- Viudedad: de 898,82 euros a 923,98 euros mensuales (+25,16 euros).
- Orfandad: de 503,30 euros a 517,39 euros mensuales (+14,09 euros).
- A favor de familiares: de 744,90 euros a 765,75 euros mensuales (+20,85 euros).
Este ajuste en las pensiones representa un alivio financiero para millones de pensionistas en España, especialmente en un contexto de inflación y aumento del coste de vida. Aunque la subida media se traduce en alrededor de 600 euros adicionales al año para una pensión de jubilación, muchas personas aún encuentran dificultades para llegar a fin de mes.
Los pagos de las pensiones se realizan, de manera oficial, entre los días 1 y 4 de cada mes. Sin embargo, muchas entidades bancarias han implementado el adelanto de estos ingresos. En este sentido, bancos como Santander, BBVA, Caixabank y Cajamar suelen realizar los pagos entre el 22 y el 26 del mes anterior, permitiendo a los pensionistas disponer de su dinero con antelación.
El mes de marzo de 2025 será clave para los pensionistas en España, ya que confirmará la aplicación definitiva de la subida de las pensiones aprobada por el Gobierno. Esta medida beneficiará a millones de personas, permitiéndoles mantener su poder adquisitivo en un contexto económico desafiante.
Pensiones mínimas contributivas
En 2025, las pensiones mínimas contributivas de jubilación varían según la situación del beneficiario. Para jubilados de 65 años o más, el mínimo anual es de 12.241,60 euros si no tienen cónyuge a cargo y 15.786,40 euros si lo tienen. En el caso de menores de 65 años, la cantidad mínima es de 11.452 euros sin cónyuge a cargo. Para quienes provienen de una gran invalidez, la cuantía aumenta hasta los 23.678,20 euros anuales.
Las pensiones por incapacidad permanente también dependen del grado de invalidez y la situación familiar del beneficiario. La pensión mínima para gran invalidez es de 23.678,20 euros anuales si hay cónyuge a cargo, mientras que la incapacidad absoluta o total a partir de los 65 años garantiza un mínimo de 15.786,40 euros. Para menores de 60 años con incapacidad derivada de enfermedad común, la prestación mínima es de 9.024,40 euros anuales.
Las pensiones por viudedad y orfandad en 2025 se ajustan a las circunstancias personales del beneficiario. Un viudo con cargas familiares recibe 15.786,40 euros anuales, mientras que si tiene entre 60 y 64 años, la cuantía es de 11.452 euros. En el caso de orfandad, la pensión mínima por beneficiario es de 3.745 euros, pero se incrementa a 7.361,20 euros si el menor tiene una discapacidad superior al 65 %. Para orfandad absoluta, el mínimo se eleva en 8.752,80 euros anuales repartidos entre los beneficiarios.
Requisitos
Las pensiones contributivas se financian mediante las cotizaciones a la Seguridad Social que realizan tanto los trabajadores como los empresarios a lo largo de la vida laboral. Estas prestaciones sustituyen los ingresos salariales tras la jubilación, incapacidad o fallecimiento del sustentador, siempre que se cumplan los requisitos establecidos.
Existen diferentes tipos de pensiones contributivas según la contingencia que las origina. La pensión de jubilación cubre la pérdida de ingresos al finalizar la vida laboral, mientras que la de incapacidad protege a quienes sufren una reducción o anulación de su capacidad para trabajar. La pensión de viudedad compensa la pérdida económica tras el fallecimiento de un cónyuge, y la de orfandad proporciona ayuda financiera a menores tras la muerte de sus progenitores. Para acceder a estas prestaciones, es obligatorio haber cotizado un mínimo de años y cumplir con ciertos requisitos de edad y situación laboral.
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