Reino Unido da una lección a Sánchez y acude al rescate de sus empresas con ayudas directas

La tercera oleada de Covid-19 ha golpeado duramente a las empresas, ante las nuevas restricciones adoptadas por los gobiernos europeos para contener la propagación del virus. Uno de los países especialmente golpeados por esta situación es Reino Unido, donde además se enfrentan al problema de la nueva cepa de coronavirus. Sin embargo, la reacción del Gobierno de Boris Johnson ha sido muy distinta a la adoptada por el Gobierno de Pedro Sánchez.

La Administración británica ha anunciado un nuevo paquete de ayudas de 4.600 millones de libras (5.086 millones de euros) dirigido a empresas afectadas por las nuevas restricciones impuestas en el país, incluyendo 4.000 millones de libras (4.423 millones de euros) en subvenciones que beneficiarán a alrededor de 600.000 compañías de Reino Unido.

De este modo, el nuevo paquete de ayudas propuesto por el Gobierno de Johnson contempla el pago de una subvención complementaria de hasta 9.000 libras (9.952 euros) por propiedad para comercios minoristas, negocios hoteleros y de ocio con el fin de ayudar a estas empresas a aguantar hasta la primavera. Asimismo, se dotará con 594 millones de libras (657 millones de euros) un fondo discrecional para ayudar a otras empresas afectadas.

Estas propuestas, se encuentran muy lejos del plan de rescate y las ayudas anunciadas por la coalición de Pedro Sánchez y Pablo Iglesias. Así, el plan anunciado por la ministra de Turismo, Comercio y Hostelería, Reyes Maroto, decepcionó tanto al sector de la hostelería, como al turismo en su conjunto y también a los pequeños y grandes comerciantes. Tras varios meses de restricciones y confinamientos, las empresas afectadas todavía no han recibido ayudas directas, pese a llevar reclamándolas desde el pasado mes de marzo.

Mientras en Reino Unido, el ministro de Finanzas, Rishi Sunak, defendió que  «anunciamos una nueva inyección de efectivo para apoyar las empresas y los empleos hasta la primavera. Esto ayudará a las empresas a pasar los meses venideros y, de manera crucial, ayudará a mantener los puestos de trabajo, de modo que los trabajadores puedan estar listos para regresar cuando puedan reabrir».

Además la administración británica ha defendido la necesidad de apoyar no solo a quienes están en la primera línea del comercio minorista, los hoteles y el ocio, sino también a las empresas de las cadenas de suministro y a comunidades comerciales más amplias que también están sintiendo los devastadores impactos de estas restricciones.

Otros países europeos

Además, hay que tener en cuenta que el resto de países europeos sí han apoyado a sus sectores afectados como la hostelería con ayudas directas. Este es el caso de los Países Bajos, donde el Gobierno ha dado 15.000 millones de euros, seguido por otras potencias como Alemania (10.000 millones de euros ), Francia (6.000 millones de euros) o Italia (5.5000 millones de euros). Así, el Ejecutivo español vuelve a situarse a la cola y da la espalda a la situación que viven miles de pequeñas y medianas empresas (pymes) que tendrán que cerrar sus puertas de forma definitiva ante la falta de apoyo.

Así, las críticas a las ayudas concedidas por el Gobierno de Pedro Sánchez se acumulan en las últimas semanas. El portavoz de la Confederación Empresarial de Madrid-CEOE (CEIM), Francisco Aranda, ha reclamado al Gobierno central «ayudas directas y reales» a las empresas, así como que aplace «cualquier decisión» de incrementar impuestos, que tendría un efecto «letal» para miles de empresas y autónomos.

Por su parte, desde la Federación Nacional de Trabajadores Autónomos (ATA), han reclamado que «los mecanismos de protección están funcionando pero hay que prorrogarlos, mejorarlos y poner en marcha más con ayudas directas a los sectores más afectados. El Gobierno debe facilitar el acceso a la prestación por cese de actividad a los autónomos que no la solicitaron en marzo, porque no la necesitaban, pero que ahora sí la necesitan y no les está permitido».