El turista ya no es lo que era: claves sobre su nuevo perfil como consumidor
Ahora que se acerca el verano, vemos una gran multitud de ofertas relacionadas con agencias de viaje y todo tipo de compañías que concentran una parte de la actividad durante esta época. Hay que tener en cuenta que, en sectores tan estacionales como el “sol y playa”, una proporción muy grande de los ingresos de todo el año se concentran en unos pocos meses. Por lo tanto, es normal que se centre la mayor parte de la inversión en marketing en estos días.
Ahora bien, el consumidor tipo ha cambiado mucho en los últimos años, especialmente a partir de la aparición de las nuevas tecnologías. Es lo que analizaremos a continuación
¿Cómo es el nuevo turista?
Las empresas deben de adaptar su estrategia de marketing a las nuevas manifestaciones del consumidor turista. Los aspectos a tener en cuenta son los siguientes:
· Planifica por Internet sus vacaciones. Antes, era habitual que cuando un grupo de personas querían marchar al extranjero o a cualquier lugar, fueran en personas a una agencia de viajes y que allí se informaran de las ofertas existentes. Ahora eso ocurre mucho menos. El nuevo turista se informa mayoritariamente por Internet y, más que buscar packs, prefiere él mismo planificarse su propia ruta. Es más autónomo y es capaz de encontrar los itinerarios y alojamientos más adecuados a sus necesidades.
· No se queda con la primera opción. La posibilidad de conseguir mucha información sobre cualquier lugar del mundo en poco tiempo facilita que el turista no se conforme con lo primero que encuentra. Antes de tomar la decisión final, habrá mirado multitud de páginas web y lugares donde ir.
· Valora las opiniones de los otros usuarios. Es un aspecto que cambia totalmente el flujo de información tradicional. Para el cliente turista, es de mucho más valor las opiniones que manifiestan los usuarios en las redes que aquello que puedan escuchar en la publicidad. Por lo tanto, es imprescindible que todas las empresas que trabajan en el sector ofrezcan a todas las personas una atención impecable, porque cualquier opinión negativa puede causar un perjuicio muy importante a su negocio.
· Exige mucha información antes de tomar la decisión. Es habitual que el consumidor, antes de elegir el lugar donde ir o alojarse, pregunte al establecimiento cualquier cuestión, especialmente si se trata de algún punto sobre el cual un usuario ha mostrado incomodidad. Así pues, hay que ser rápidos y eficaces dando respuesta a estas dudas.
· Exige poder dar su propia opinión. Al nuevo turista no le basta con vivir la experiencia, también quiere compartirla y darla a conocer al mundo. Por lo tanto, si no se cumplen con las expectativas que tenía, dará una opinión no positiva que afectará negativamente sobre la futura llegada de turistas.
· Busca vivir experiencias más allá que conocer un lugar. Uno de los principales motivos por los cuales el turista decide marchar unos días a un lugar es para romper la monotonía. Por lo tanto, no solamente busca ir a un espacio en el cual sentirse cómodo, sino vivir algo diferente y especial que pueda recordar.
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