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Lo confirma la OCU: esto es lo que diferencia el combustible low cost del resto y está comprobado

El  precio de la gasolina es un tema que afecta a millones de conductores en España. Los datos del Ministerio de Transporte hablan de 13 millones de vehículos que utilizan diésel y 11  millones que usan gasolina, sumando los que son híbridos que también requieren de este combustible. En definitiva millones de conductores que repostan, en muchos casos de forma regular o a diario, y que apuestan cada vez más, por las llamadas gasolineras low cost. Pero, ¿son más baratas realmente? ¿su combustible es recomendable?  La OCU ha hecho un estudio y tiene la respuesta desvelandolo que diferencia el combustible low cost del resto.

La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha querido analizar e profundidad cómo es el combustible que ofrecen las gasolineras pero no sólo las low cost, también las más caras, y lo ha llevado al laboratorio. En concreto, ha analizado 80 muestras de gasolina y gasóleo recogidas en estaciones de servicio de todo tipo desde grandes cadenas, a medianas, y también low cost e hipermercados, y con ello, comprobar si existían diferencias reales de calidad. Y el resultado, según los técnicos, es mucho más claro de lo que podría imaginarse cualquiera. En ningún caso se han encontrado combustibles adulterados, fuera de los límites legales o con indicadores de mala conservación. Es decir, que repostar en una gasolinera barata no supone un riesgo para el motor, y en muchos sí que parece un ahorro, algo que seguro apreciarán quienes ya de por sí suelen decantarse por este tipo de gasolineras.

El análisis de la OCU sobre el combustible low cost

El estudio de la OCU radiografía un mercado con 12.685 estaciones de servicio activas en España. Repsol concentra la mayor red, con 3.235 gasolineras, seguida por Moeve (antes Cepsa), que suma 1.435, y BP, con 691. Son las que tradicionalmente han marcado la referencia de precios, aunque en los últimos años han cedido terreno a las cadenas de bajo coste y a los hipermercados, que apuestan por márgenes más pequeños y sistemas de autoservicio para rebajar el precio final.

Los precios recogidos el 30 de octubre de 2025 muestran diferencias claras entre grupos:

Ese diferencial significa que llenar un depósito de 70 litros, algo muy habitual en vehículos diésel, puede suponer 10,50 euros de ahorro si se compara una gasolinera de hipermercado con una gran cadena. En gasolina, el ahorro ronda los 9 euros por cada repostaje. A lo largo del año, en un país con millones de conductores que utilizan su coche a diario, la diferencia es notable.

Los resultados de laboratorio sobre la gasolina barata

Para comprobarlo, la OCU recogió 40 muestras de gasolina 95 en mangueras anónimas de distintas cadenas repartidas por toda España. El análisis se realizó siguiendo la normativa europea (EN 228) y comprobando parámetros tan delicados como el nivel de azufre, la densidad, la presión de vapor o el punto final de ebullición. Todos ellos determinan si la gasolina es segura, estable y adecuada para el motor.

Los resultados fueron consistentes:

Como detalle, la OCU señala que las muestras con valores más altos y más bajos de azufre pertenecían a dos estaciones de la misma cadena. Es decir, incluso dentro de una marca conocida pueden existir variaciones. Y, al mismo tiempo, algunas gasolineras low cost ofrecieron resultados excelentes.

Los gasóleos también cumplen

El gasóleo es, por tradición, el combustible más sensible a la contaminación por agua o a problemas de almacenamiento. Por eso, la OCU insistió en aspectos clave como la presencia de humedad, el punto de inflamación o la capacidad del gasóleo para no obstruirse a bajas temperaturas.

Las 40 muestras de diésel analizadas pasaron todas las pruebas:

Al igual que en la gasolina, los mejores resultados no se concentran en un tipo de cadena concreta. Hay excelentes muestras en estaciones baratas y algunas de calidad media en cadenas tradicionales. Lo importante aquí es que todas cumplen la ley, sin excepción.

El motivo por el que no hay grandes diferencias

El informe también explica algo que muchos conductores desconocen: en España, la gasolina y el gasóleo provienen prácticamente de las mismas ocho refinerías. A partir de ahí se trasladan a centros logísticos y, desde ellos, los camiones cisterna los distribuyen a estaciones de servicio de todo tipo. De este modo, en una misma zona geográfica, es muy probable que una estación low cost y una estación de una gran cadena reciban exactamente el mismo combustible base. ¿La diferencia? Los aditivos.

El informe de la OCU acaba señalando que las marcas que no tienen aditivos propios utilizan HQ300 (gasóleo) y HQ400 (gasolina), diseñados para mantener limpios inyectores y evitar depósitos. En cuanto a las  grandes cadenas usan mezclas similares, pero con su composición particular. De este modo, según la Organización, no existe evidencia concluyente de que esos aditivos exclusivos mejoren el consumo, la vida del motor o las prestaciones. Y en los parámetros analizados, no aportan variaciones apreciables.