Economía
Según un informe de KPMG

La reindustrialización, el siguiente reto de la economía española

La industria española sabe que que los nuevos tiempos le exigen una transformación digital y tecnológica para adaptarse al nuevo entorno competitivo. Algo que ya están haciendo si nos fijamos en la encuesta realizada por KPMG entre 100 directivos industriales españoles en la que 9 de cada 10 confiesan que ya están sumidos en esa transformación.

En 2010, la Unión Europea fijó dentro de su estrategia que el peso del sector industrial representase el 20% del PIB de los países miembro para 2020. En España, esta contribución se sitúa en el 15,6% según la última cifra publicada por el INE para 2013. Durante los últimos 10 años, el valor añadido bruto del sector industrial español se ha mantenido por debajo del europeo, pero en cuanto al relativo de su actividad industrial, nuestro país ha conseguido ubicarse en el grupo que han experimentado una reducción igual o menor que la media comunitaria.

Las reformas del PP están bien pero se quedan cortas

Así las cosas, el 59% de los directivos consultados por KPMG confían en que su sector evolucionará positivamente los próximos 12 meses. Por sectores, automoción, consumo y química son los más optimistas.

Los directivos también ponen «tareas» al Gobierno para que esta reindustrialización se lleve a cabo. La reducción del coste energético es uno de los retos y se puede obtener mediante la eficiencia energética, optimización del consumo y el abaratamiento de la energía incrementando las interconexiones con Europa.

También hay que potenciar la inversión en I+D+i a dos niveles; por un lado la innovación que se genera en la universidad y los centros tecnológicos, con una posición muy competitiva respecto a países como China, Usa y Canada, a pesar de que han rebajado su inversión en estas partidas. Por otro lado, la innovación que se crea en las propias empresas no es tan competitiva en España porque las compañías creen que se destinan pocos recursos financieros a ello.

El reto fundamental se basa en acortar la distancia existente entre los dos ámbitos, y destaca que para impulsar definitivamente la tan traída y llevada reindustrialización es necesario implementar medidas concretas que apoyen la investigación aplicada, como ya sucede en Alemania, donde se impulsan iniciativas para hacerlas llegar a las empresas con el menor coste posible.

Parece, en opinión de los directivos consultados, que los anuncios realizados por el Gobierno del PP en esta materia son necesarios pero podrían quedarse cortos. Así, estos ejecutivos sugieren que deben ir acompañadas de otras medidas para impulsar el fortalecimiento y el desarrollo de la industria.