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El Ibex cae un 10% desde máximos: ¿momento de comprar o de vender?

  • Eduardo Segovia
  • Corresponsal de banca y empresas. Doctor y Master en Información Económica. Pasó por El Confidencial y dirigió Bolsamanía. Autor de ‘De los Borbones a los Botines’.

El Ibex 35 vivió ayer un buen susto, con caídas que llegaron a superar el 4% aunque al cierre se redujeron hasta el 2,34%. De esta forma, aceleran los descensos que comenzaron en junio y que han hecho perder al índice más de 1.000 puntos, por encima del 9% en términos porcentuales. Ante estas pérdidas de la Bolsa, la eterna pregunta es si es momento de vender o de comprar.

La respuesta nunca es fácil y, al final, depende de cada inversor individual: de cuándo haya entrado y a qué precio -es decir, si aún gana pese a la caída o está en números rojos-, de su plazo de inversión y de su tolerancia a las pérdidas (si no puede soportar estos descensos, quizá es mejor que invierta en algo más seguro que la Bolsa).

Pero, en general, cuando un índice o un valor pierde en torno al 10% como el Ibex, es demasiado tarde para vender. Eso no significa que las caídas no puedan continuar, y probablemente lo harán tras algún pequeño rebote. Es decir, esa caída puede llegar al 15% o más sin ninguna dificultad. Por eso, el que no pueda soportar estos niveles de pérdida, debería aprovechar esos rebotes para salir del mercado y limitar la potencial sangría.

No obstante, la mayoría de los analistas recomienda mantener posiciones, sobre todo si se invierte a largo plazo: normalmente (no siempre, cuidado), a largo plazo en Bolsa se gana, aunque se pierda por el camino. Esto al final depende de en qué situación se encuentre el mercado; es decir, si esto es una corrección dentro de la tendencia alcista o si es el inicio de una tendencia bajista, en cuyo caso los descensos pueden ser mucho mayores.

En principio, los expertos creen que estamos en el primer escenario: una corrección que tenía que llegar después de las fuertes subidas del último año, en especial en sectores como la banca del Ibex o las tecnológicas norteamericanas.

«De momento, los niveles clave no se han roto y podríamos estar ante una corrección más o menos seria, pero no ante el inicio de un mercado bajista prolongado. Las caídas en los precios, aunque significativas, pueden estar reflejando un ajuste necesario tras un período de revalorización insostenible. En los últimos años, los mercados han experimentado un crecimiento rápido, impulsado en parte por políticas monetarias expansivas y una búsqueda global de rendimientos en un entorno de bajos tipos de interés. Este tipo de crecimiento suele ser vulnerable a correcciones, especialmente cuando las condiciones monetarias comienzan a endurecerse, como es el caso de Japón», sostiene Javier Molina, del broker eToro.

A favor de esta tesis está esa fuerte subida previa, que había provocado que las Bolsas alcanzaran valoraciones muy altas. Y las inevitables tomas de beneficios de los traders, el llamado «mal de altura». Si este es el escenario correcto, la Bolsa subirá de nuevo cuando haya purgado esos excesos.

Por consiguiente, sería un buen momento para comprar, no para vender. Teniendo en cuenta, como se ha dicho, que las caídas pueden prolongarse todavía más. Y que comprar justo en el mínimo es casi imposible. Nadie sabe exactamente dónde estará. Es decir, hay que tener estómago para aguantar posibles pérdidas iniciales.

¿Y si es una tendencia bajista?

Ahora bien, esta opinión puede estar equivocada y podemos encontrarnos, efectivamente, ante el inicio de una tendencia bajista. Hay elementos de incertidumbre como el deterioro de la economía de Estados Unidos, que se evidenció en el dato de empleo del viernes, sin que la Reserva Federal haya empezado a bajar los tipos. O la subida del yen, que puede causar un grave problema a las exportaciones japonesas.

La gestora francesa La Financière de l’Echiquier añade a estas incertidumbres las «políticas, principalmente las elecciones presidenciales estadounidenses». Y añade que, «en caso de que se invierta el sentimiento sobre los valores tecnológicos, la corrección podría ser significativa, habida cuenta de las ganancias pasadas».

Por eso, esta firma ha decidido reducir su exposición a la renta variable, en especial a la tecnología, a la espera de que escampe. Esa es otra actitud prudente que pueden tomar los inversores en el Ibex: reducir algo sus posiciones ahora y esperar a que el mercado haga suelo para volver a comprar (aunque se pierdan la subida inicial).