Las exportaciones salvan el crecimiento de España ante la debilidad del consumo y la inversión
El turismo y el comercio exterior impulsan el crecimiento de la economía española
El consejo de economistas eleva la previsión de deuda y de déficit muy por encima de la del Gobierno
La demanda exterior de las empresas españolas está permitiendo hoy por hoy que la economía española continúe a flote ante la debilidad del consumo interno y la inversión, según se observa en el informe Observatorio Financiero y Claves Económicas del Consejo General de Economistas, presentado esta martes.
El crecimiento del PIB del primer trimestre de este año se ha debido fundamentalmente al sector exterior, impulsado por un incremento de las exportaciones del 10,4% interanual. Mientras, el consumo interno sólo ha aumentado un 1,5% y la formación bruta de capital, un 0,8%, lo que lo deja como el indicador macro que menos crece.
Salustiano Velo, analista del Consejo General de Economistas, asegura: “en Europa los indicadores del sector servicios están teniendo un mejor comportamiento que los indicadores del sector industrial; es por ello por lo que los países donde el sector servicios es más fuerte, como España, Grecia o Portugal, están arrojando una mayor ratio de crecimiento”.
Mientras, el director del Servicio de Estudios del CGE, Salvador Marín, ha resaltado: “Nuestra economía sigue en un proceso de ajuste de expectativas que no termina de consolidarse, cierto que con algunos índices macroeconómicos en mejor situación dentro del contexto europeo a corto plazo, pero con las incertidumbres clásicas de la deuda pública, déficit y desempleo presionando en sentido negativo de cara al medio y largo plazo en ese mismo ejercicio comparativo, a lo que se une que la confianza de los consumidores tampoco está ayudando a despejar de forma rotunda las posibles dudas a futuro”.
Por debajo del nivel prepandemia
El Consejo General de Economistas recuerda también que el PIB real se encuentra un 0,2% por debajo de su nivel previo a la pandemia, mientras que el de la zona euro se encuentra un 2,5% por encima. Además, también señala que la reducción de la bolsa de ahorro de las familias, la caída de la demanda interna, el posible freno del turismo, las consecuencias de la sequía y el aumento de los tipos de interés, con su incidencia en el sector inmobiliario y de la construcción, constituyen importantes incógnitas para el segundo semestre de 2023.