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Comunicado de Mercadona por el brote de gripe aviar que te va a afectar: «La situación…»

En las últimas semanas, muchos clientes de Mercadona se han encontrado con algo que les ha llamado la atención: algunos tipos de huevos, los que proceden de gallinas criadas fuera de jaulas, aparecen en menor cantidad que de costumbre. Y lo cierto es que debido a todo lo que está ocurriendo con la gripe aviar circulando, muchos de los Jefes de esta cadena se preguntan si cabe la posibilidad de que exista un problema real detrás. La compañía ha querido aclararlo porque sabe que el huevo es uno de esos productos que casi todo el mundo compra sin pensar dado que es un básico en nuestra gastronomía.

Desde hace años, Mercadona ha ido cambiando poco a poco su modelo para que cada vez más huevos procedan de gallinas libres de jaula. Es un proceso largo, caro y que implica a muchos proveedores. Por eso el aviso ha generado dudas. ¿Se ha frenado el proyecto? ¿Va para atrás? ¿Tiene algo que ver la alarma sanitaria? La empresa insiste en que no: el cambio sigue su curso, sólo que la situación actual obliga a ajustar de forma temporal el ritmo. Y es que el brote de gripe aviar que afecta a España y a buena parte de Europa ha obligado a aplicar medidas de protección muy estrictas. Una de ellas (quizá la más visible) es el confinamiento de las aves. No es algo opcional. Y, lógicamente, cuando una gallina pasa a estar confinada, aunque sea por salud animal, ya no puede entrar dentro de esa clasificación como libre de jaula. De ahí el descenso temporal que anuncia ahora la cadena de Juan Roig.

Qué está pasando exactamente con los huevos en Mercadona

En condiciones normales, Mercadona suele tener alrededor del 65% de sus huevos frescos procedentes de gallinas criadas sin jaula. Es una cifra muy elevada comparada con la media del sector y, de hecho, es uno de los puntos fuertes de la cadena. Pero la situación sanitaria ha obligado a revisar esos porcentajes.

Las fuentes de la compañía lo explican con bastante claridad: el confinamiento de las gallinas es obligatorio mientras dure el brote. Y como esa medida cambia las condiciones de crianza, el huevo deja de poder venderse bajo esa categoría. No implica para nada un problema de seguridad alimentaria ni supone un retroceso en la apuesta de la empresa. Es, simplemente, un paréntesis temporal.

«La situación es puntual y retomaremos los niveles habituales tan pronto como sea posible», asegura la empresa, tranquilizando así a quienes han visto cambios en el lineal y han pensado que había algo más detrás.

Una transformación enorme que no se detiene por un brote puntual

Para llegar al objetivo de comercializar sólo huevos procedentes de gallinas libres de jaula, Mercadona y sus proveedores han tenido que invertir cantidades muy importantes durante los últimos años. La cifra ya supera los 200 millones de euros, y la previsión es que, cuando todo se haya completado, el total supere los 400 millones. No es precisamente un reto menor, de hecho, las cifras de las ampliaciones de las granjas hablan por sí solas:

Y esto sólo es una parte de todo el proceso. También han tenido que reconvertir sistemas combinados, adaptar instalaciones antiguas y cumplir nuevos certificados de bienestar animal. Todo lo que ya estaba en marcha sigue en marcha, incluso en plena crisis aviar.

La importancia del bienestar animal

La cadena insiste en algo que suele repetir mucho, pero que en este contexto tiene sentido recordar: todos sus proveedores de carne fresca, leche y huevos deben contar con certificación en Bienestar Animal. No basta con que digan que cumplen ciertos criterios; la certificación tiene que estar vigente en todo momento y validada por organismos reconocidos.

Dentro de estos estándares se incluyen cuestiones muy concretas, como que las gallinas tengan siempre agua potable disponible, una alimentación adecuada, zonas de sombra, espacios donde descansar y una calidad del aire que no comprometa su salud. Son condiciones que, incluso ahora, con el confinamiento temporal, se siguen respetando.

Un mensaje claro: no hay marcha atrás

En resumen, lo que Mercadona quiere transmitir es que esta reducción puntual en los huevos de gallinas libres de jaula no cambia nada de fondo. El proyecto continúa, los proveedores siguen ampliando y adaptando instalaciones y el compromiso de la empresa se mantiene. En cuanto las autoridades permitan levantar las medidas sanitarias, los porcentajes volverán a los niveles habituales.

Hasta entonces, la compañía opta por la transparencia: explicar lo que está pasando y pedir paciencia. No hay escasez, no hay riesgo para el consumidor y no hay retroceso en su apuesta. Sólo un brote que obliga, durante unas semanas, a modificar la etiqueta de parte de la producción.