Boeing se juega 600.000 millones mientras Airbus se revaloriza más de un 6%

Las acciones de la multinacional estadounidense The Boeing Company se han visto afectadas esta semana, tras la tragedia que tuvo lugar el pasado domingo en Etiopía cuando un Boeing 737 MAX 8 se estrelló, cobrándose la vida de 157 personas. La compañía se juega 600.000 millones de dólares en pedidos de diferentes aerolíneas, lo que supone más de medio billón de euros.

El modelo 737 MAX 8 representa el 33% de los beneficios del grupo y un 45% del total estimado del Ebitda de la compañía para los próximos cinco años. Tras la decisión de la mayor parte de países del mundo, entre ellos Estados Unidos, de cerrar el espacio aéreo a estos aviones, el fabricante se enfrenta al riesgo de que sus pedidos sean cancelados. Este viernes, la aerolínea rusa Pobeda Airlines amenazó con cancelar la compra de alrededor de 20 unidades del Boeing 737 MAX 8 si la compañía no soluciona los problemas técnicos que presentan las naves.

En esta situación, el más beneficiado está siendo su principal competidor a nivel europeo, Airbus. La compañía se ha revalorizado en las últimas cinco jornadas por encima de un 6%, aumentando su capitalización en 4.000 millones de euros. Ambos grupos compiten por liderar el sector de la producción de aviones y las dudas sobre el funcionamiento del Boeing han afectado directamente a su imagen, moviendo a los inversores a dirigir sus carteras hacia Airbus.

A está débil situación a nivel bursátil se unen las reclamaciones que numerosas aerolíneas valoran presentar como compensación por los Boeing de este modelo que han tenido que dejar fuera de servicio a lo largo de la semana. La compañía noruega Norwegian ya ha anunciado que «esperan que Boeing asuma la factura» ya que su flota cuenta con 18 aviones de este tipo.

Boeing es la mayor firma aeronáutica del mundo y la primera exportadora de Estados Unidos

Dario García, analista de XTB, señala que, «Boeing ha venido penalizando durante toda la semana la noticia de la tragedia vivida en Etiopía el pasado domingo. Sin embargo, hay que tener en cuenta que es la compañía con mayor volumen de ventas con más de 92 clientes y a nivel técnico ha encontrado un soporte desde el que podría repuntar. Por otro lado, Airbus se ha visto beneficiado a lo largo de toda la semana, pero ahora mismo se encuentra en un nivel de sobrecompra, por lo que tendrá que sufrir una corrección cuando toda la situación se calme».

De este modo, Boeing cerró la jornada del viernes con una subida del 1,51%, aunque sus acciones todavía se encuentran lejos del precio que presentaban antes del inicio de la crisis vivida esta última semana, de alrededor de 422 dólares por acción, y se mantienen tras el cierre de la sesión del viernes en 378,99 dólares por acción. Por su parte, Airbus también cerró la jornada en positivo con una subida del 1,46% alcanzando los 118,5 euros por acción.

Boeing se encuentra de esta manera ante una situación incierta, con 4.636 encargos ya en proceso de fabricación y que ahora se encuentran en riesgo. A pesar de que la compañía paralizó el jueves las entregas de su modelo 737 MAX 8, ha anunciado que seguirá con su estrategia de producir una media de 52 aeronaves al mes, una vez complete la actualización del software de control de vuelo.