Economía
¿Burbuja o activo refugio?

Un bitcoin disparado se marca los 15.000 dólares como objetivo a medio plazo

Lo que nadie puede discutir es que el bitcoin, la criptodivisa más famosa, no deja de romper récords en 2017. Lo que está provocando un efecto arrastre también en otras y lo que es más importante; está obligando no sólo a los banqueros privados sino a los centrales a posicionarse al respecto.

Como ya les venimos contando en OKDIARIO, el bitcoin, que hace tan sólo un año provoca carcajadas en las plantas nobles de muchas entidades financieras no deja de subir. Tan es así que tras esta semana de vértigo en la que primero batió la cota de los 10.000 dólares y después la de los 11.000, ahora muchos analistas se plantean incluso los 14.000–15.000 dólares como un objetivo plausible incluso antes de que termine este año.

El problema, señores lectores, es que el paso de los 10.000 a los 11.000 dólares de cotización de la que es probablemente la criptodivisa más conocida del mundo es que lo consiguió en tan sólo 24 horas, con una revalorización en ese corto periodo de tiempo de un 15%.

Ahora se mueve en el entorno de los 11.300 dólares a la espera del siguiente salto que nunca se sabe si puede ser el mortal o un paso más en una escalada imparable. De hecho, su capitalización total roza ya los 190.000 millones de dólares.

El sitio de referencia para seguir estas monedas digitales es la web Coinmarketcap y mirando sus pantallas podemos observar que el bitcoin comenzó el año por debajo de los 1.000 dólares y el mes de octubre superaba discretamente los 4.000.

Este último arreón ha dejado muy atrás a los analistas, que también los hay, convencidos de que estas criptodivisas van a ser el futuro financiero del mundo occidental. De hecho, hay quienes auguran que el bitcoin se pondrá en 14.000 dólares la unidad en 2018. Frente a esto también hay quienes aseguran que todo esto se puede convertir en una burbuja más explosiva de la que supuso las compañías puntocom a principios del siglo XXI.

Mientras la polémica continúa abierta, lo cierto y verdad es que las criptodivisas continúan dando ‘pasitos’ como el resto de monedas y se plantea el inminente lanzamiento de contratos de futuro sobre los bitcoin en USA. Tan es así que algunos de los brokers de referencia en el mercado de futuros CME Group y CBOE los quieren sacar al mercado antes de que lleguen las Navidades. Lo que sería una explicación del porqué de este incremento de su precio en poco tiempo.

Todas las criptomonedas en circulación suman ya un valor total de 330.000 millones de dólares. 

Para que se hagan una idea, el bitcoin se ha revalorizado más de un 1.000% en lo que llevamos de año, algo que a los gestores de fondos de alto riesgo les encanta pues es difícil conseguir rentabilidades de esa cuantía miren hacia donde miren.

Además, buena parte de aquellos brokers que han convertido el medio online en su forma de ganar cuota de mercado aplauden esta criptomoneda como forma de apoyar su propio negocio. Así, Dennis de Jong, director general de UFX.com, especializada en materias primas, divisas, acciones e índices afirma que incluso conseguirá los 15.000 dólares sin convertirse en una forma de pago habitual pero que luego seguirá avanzando a medida que se acepte como una forma de intercambio convencional y de una mayor difusión por todo el planeta.

También en este periódico les hemos querido advertir que no todo el mundo comparte esta tesis. Desde posturas intermedias como la del cinematográfico Lobo de Wall Street que dice que puede que no sea una estafa pero toda la pinta tiene, al gurú financiero Mark Hulbert que también alertan de un crash del bitcoin a corto. Sin embargo, Kay Van-Petersen, estratega global del Saxo Bank estima que la mencionada criptodivisa se irá fácilmente hasta los 100.000 dólares en tan sólo 10 años. 

Como les decíamos todo esto está haciendo que el mercado se mueva y la segunda criptomoneda, el Ether, también alcance máximos de más de 420 dólares. Esta divisa, rival del bitcoin, también se ha revalorizado un 5.000% en lo que llevamos de año con una capitalización de mercado de 40.000 millones de dólares.

También esta moneda tienes fans incondicionales como el millonario Mike Novogratz que dice que alcanzará los 500 dólares antes de que nos tomemos este años las uvas. Este inversor recuerda también que parte del auge de las criptomonedas se debe a la falta de confianza que tiene el mercado en las instituciones financieras tras el crash de 2008.

Precisamente por esto hay quienes vuelve sus ojos sobre los bancos centrales pidiendo un análisis, una explicación o incluso una recomendación.

Aunque comparada con las reservas del BCE, de la FED o del Banco de China, la capitalización de mercado de estas criptomonedas en su conjunto es baja (300.000 millones de dólares frente a trillones) las cifras empiezan a coger volumen y una caída brusca podría representar un coste de imagen así como cierta desestabilización para el mercado.

Así, el miembro del consejo del BCE, el austriaco Ewald Nowotny ha afirmado recientemente que están estudiando si la actividad bancaria en relación con el comercio de criptomonedas debe regularse mejor. Aunque el propio Draghi dijo que todavía tenían poca conexión con la economía real, no descartan desde Frankfurt ofrecer en breve una respuesta reguladora sobre este particular. Algo que debería coordinarse mundialmente para evitar incómodas gateras. También el flamante presidente de la FED no cree que puedan desestabilizar la economía.

Curiosamente el único que se lo ha tomado verdaderamente en serio ha sido el banco central chino que prohibió en septiembre las ofertas iniciales de criptomonedas pues creen en el país asiático que son esencialmente una forma de financiación ilegal no aprobada que suscita sospechas de venta ilegal de billetes, emisión de valores, fraude financiero y actividad delictiva relacionada.