Los arquitectos aplauden que Ayuso suba el precio de la vivienda protegida para atraer a las constructoras
Sigfrido Herráez (COAM): "La solución para desarrollar más vivienda asequible es aumentar el precio del módulo"
Los constructores, promotores y arquitectos aplauden que la Comunidad de Madrid vaya a subir antes de final de año el módulo de Vivienda de Protección Oficial (VPO) para que los proyectos sean viables. Dependiendo del régimen de protección de cada desarrollo, el incremento de los precios se situará entre un 25% y un 35% de los valores actuales.
Al respecto, Sigfrido Herráez, decano del Colegio de Arquitectos de Madrid (COAM), explica en una entrevista con OKDIARIO que «una de las soluciones para poner más vivienda asequible en el mercado es el aumento del módulo de la vivienda protegida». La vivienda ha sido el foco del Congreso Inmobiliario INMOMAT, organizado por el COAM del 15 al 16 de noviembre, y la accesibilidad a la misma, uno de los principales temas de debate.
En el caso de Madrid, el arquitecto señala que esa revisión resulta «absolutamente necesaria y obligada». Esta decisión podría «desatascar muchos suelos que estaban esperando esa revisión», asegura Herráez.
Por su parte, desde de la Comunidad de Madrid aseguran a este medio que el Ejecutivo «va a actualizar los precios máximos de venta de las Viviendas de Protección Pública (VPO) de nueva construcción, para impulsar la construcción de un mayor número de inmuebles protegidos y aumentar, con ello, la cantidad de pisos asequibles para los ciudadanos».
En Madrid, el coste de este tipo de vivienda lleva sin modificarse desde 2008. En estos 15 años la inflación ha subido un 31,2% y los costes en el sector de la construcción se han incrementado también en torno a un 30%, como consecuencia del encarecimiento del precio de la energía, de las materias primas y del transporte. De ahí, la decisión de la Comunidad de Madrid de subir el precio del módulo de la vivienda protegida.
El decano del Colegio de Arquitectos de Madrid considera que es importante ver, revisar y flexibilizar la normativa. Eso va a hacer que «volvamos a producir las viviendas que se necesitan en la capital para jóvenes y para ciudadanos que han pasado de ser jóvenes y que todavía tienen esa necesidad, aquellos que tienen entre 30 y 40 años».
Por otro lado, el arquitecto señala que otro problema en la construcción de nueva vivienda protegida está en la velocidad de creación de suelo, que en España es generalmente muy lenta. «Ese es el principal problema y es que, administrativamente, nos hemos complicado mucho la vida, demasiado diría yo, a la hora de acceder a tener un suelo urbanizado», apunta.
Nuevos desarrollos de vivienda
Herráez también explica que para que los nuevos desarrollos urbanísticos vayan por el buen camino es «indispensable» pensar que ahí va a vivir gente. «Como diseñadores y urbanistas debemos estar siempre pendientes de cuál es la calidad de vida que ofrecemos una vez que se planta un árbol en una acera o en un espacio de recreo o destinado a descanso, se pone un banco o no», afirma.
A esto, el decano añade que «al final, el diseño de la ciudad tiene que ser amable y en Madrid tenemos experiencias que no lo son, y, por tanto, creo que hay que pensar sobre todo en eso». Igual en el interior de los edificios, sean vivienda, terciarios o comerciales «tenemos que pensar siempre en el ciudadano que va a usar ese edificio». En su opinión, con ese fin útil social claro, considera que la labor del arquitecto, fundamentalmente del urbanista y del diseñador de espacios, tiene que estar alrededor del beneficio, de la calidad de vida del ciudadano