Organizar la conocida ‘Pasarela Cibeles’ cuesta 3 millones, de los cuales 900.000 € los pone Ifema

Cibeles
Desfile de Etxeberria. (Foto: Getty)
María Villardón

El jueves comienza la Mercedes Benz Fashion Week Madrid (MBFWM), conocida antaño como ‘Pasarela Cibeles’ hasta que llegó a su vida el patrocinador automovilístico. Cada edición cuesta un total de 3 millones de euros y tiene un sistema de financiación mixto, es decir, un 65% se recupera vía patrocinadores, el 30% lo pone Ifema y el 5% restante lo cubre la tarifa que pagan los diseñadores. Una estructura de financiación que no se da en el resto de las grandes pasarelas del mundo.

Ifema es la encargada de organizar esta semana de la moda madrileña, cada una de las ediciones cuesta 3 millones de euros, “alrededor de un 65% se recupera vía patrocinios, un 30% es lo que pone Ifema y un 5% es la aportación de los diseñadores”, explica a OKDIARIO Charo Izquierdo, directora de la MBFWM. Este 2017 repiten los patrocinadores principales de otras ediciones: la automovilística Mercedes, la cosmética L’Oreal y la textil Inditex. Y por otro lado, también figuran como patrocinadores Solán de Cabras, Samsung, Iberia Codorniú y Ciroc.

Pepa Bueno, directora de Asociación de Creadores Moda Española (ACME), cree que el patrocinio de Inditex es “muy inteligente y muy generoso”. Explica que desde la gallega “no echan piedras contra su propio tejado y fortalecen el sector de la moda en España porque a ellos también les beneficia”. Además, apunta Bueno en declaraciones a OKDIARIO que “cuanto mayor sea el interés por la moda, mejor le viene a Inditex, por eso apoya la pasarela. No lo hace por caridad, sino por estrategia”.

Poniendo cifras sobre la mesa, Ifema aporta para cada una de las ediciones alrededor de 900.000 euros, lo que supondría anualmente 1.800.000 euros, ya que la antigua ‘Pasarela Cibeles’ tiene dos ediciones anuales: una en febrero y otra en septiembre. Pero ¿quiénes conforman Ifema? Bien, se trata de un consorcio que pertenece al Ayuntamiento de Madrid (31%), la Comunidad de Madrid (31%), la Cámara de Comercio (31%) y la Fundación Monte Madrid (7%).

Este 30% que proviene de los presupuestos de Ifema y que va a la MBFWM es uno de los puntos más polémicos y controvertidos de esta semana de la moda. Ya se sabe que nunca llueve a gusto de todos. Izquierdo, que se estrena como directora tras la salida de Cuca Solana, defiende que “Ifema no subvenciona la pasarela, sino que pone el espacio, las modelos, maquillaje, etc. Yo no lo entiendo como una subvención”.

Esta estructura de financiación mixta contrasta con las del resto de grandes pasarelas del mundo (Milán, París, Londres o Nueva York) que se financian con capital privado. Con respecto a este asunto, Izquierdo señala que el modelo de pasarela de Madrid es “especial, la institución ferial (Ifema) ha apostado por ella e invierte de esta manera”. Pedro Mir, profesor de Isem Fashion Business School explica que, “quizá, por razones históricas se subvencionan ciertos sectores estratégicos. Hay una relación directa entre la moda y el origen al país (Marca España), éste podría ser un motivo por el cual financiar parte de esta ‘Pasarela Cibeles’”.

En esta 65º edición desfilarán un total de 42 diseñadores y cada uno de ellos deben pagar una tarifa establecida por la organización. Las marcas pagan 4.000 (+IVA) por los desfiles individuales y 2.000 euros (+IVA) por los dobles. En este precio se incluye el maquillaje y la peluquería, las modelos y la cesión de las instalaciones del pabellón 14. Si la firma quiere hacer un ‘show’ más particular, como (por poner un ejemplo) tener un grupo de música sobre la pasarela, o tener a modelos concretas deberá pagarlo de su propio bolsillo.

Izquierdo asegura que está trabajando para que la MBFWM sea una lanzadera de “negocio y no solamente de imagen”. Y añade que, para conseguir este objetivo, se está trabajando en la internacionalización de la pasarela para que haya “un mayor conocimiento de los diseñadores a nivel internacional, que vengan compradores de fuera y también prensa extranjera”. Insiste, además, en que trabajan para que los diseñadores tengan “notoriedad y repercusión, así como reconocimiento nacional e internacional”.

Lo cierto es que desfilar en la MBFWM es más económico para los diseñadores españoles que montarse el ‘la fiesta’ por su cuenta, al menos viendo cómo se las gastan en Nueva York, por ejemplo. “Producir una colección es muy costoso, hay que contratar a los patronistas, las costureras, ir a las ferias y comprar los tejidos, etc. No es solo lo que se paga por desfilar”, comenta Bueno. Además, la directora de ACME defiende a sus asociados y declara que «es falso que los diseñadores de moda vivan de las subvenciones, te aseguro que los que no tienen una industria salen de circuito y no desfilan».

Cada desfile en NY cuesta una media de 460.00 dólares

Semana de la moda de Nueva York (Foto: Getty)

En Nueva York cada una de las marcas organiza su propio espectáculo y lo paga de su bolsillo, todo capital privado. Buscan la localización, las modelos, la producción y pagan a las ‘celebrities’ que se ponen en la primera fila (Front Row) de sus desfiles. Pero la cosa va más allá, a estas caras conocidas se les paga absolutamente todo: el viaje, el hotel, las comidas y demás menesteres que pueda necesitar. Todo este ‘show’ tiene un coste aproximado de 460.000 dólares, según Business Insider. El profesor de Isem Fashion Business School explica que el caso de Nueva York es el más salvaje, porque allí “todo es mercado puro y duro” y señala que en la pasarela estadounidense “el 100% de los fondos son privados, aunque algunas instituciones locales colaboran cediendo espacios, acelerando permisos, etc”.

Eso sí, todo depende del ‘sarao’ que monte cada una de las marcas, este casi medio millón de dólares depende de algunas variables. El lugar del desfile puede costar entre 15.000 y 60.000 dólares, esta última cifra es lo que cuesta desfilar en Lincoln Center, el emplazamiento más elegido.

Los estilistas pueden tener un salario de 8.000 dólares diarios si son ‘top’ y poder tenerlos trabajando durante dos semanas. La producción y las relaciones públicas tienen un coste de entre 10.000 y 20.000 dólares. Con respecto al maquillaje y la peluquería cada una de las firmas puede pagar entre 5.000 y 15.000 euros a una empresa especializada. El coste de las modelos puede variar, las marcas internacionales suelen pagar entre 800 y 1.000 dólares por desfile, aunque también hay tarifas más bajas de entre 200 y 500 dólares por desfile, según datos de Refinery29. Y las ‘celebrities’ pueden cobrar, según el caché, entre 100.000 y 15.000 dólares. Imaginen si va a tres desfiles a 100.000 dólares.

Y no solo eso, con las tecnologías el desfile se puede ver en cualquier punto del mundo a través de un streaming que tiene un coste de entre 20.000 y 50.000 euros. Por ejemplo, en 2011 el presidente de Marc Jacobs, Robert Duffy declaró a New York Times que el desfile costó alrededor de 1 millones de dólares. Eso es poderío, no cabe duda.

Lo último en Economía

Últimas noticias