El Real Madrid irá a por un central en el mercado de invierno si Alaba, que lleva nueve meses de baja por su rotura del ligamento cruzado, no vuelve a su nivel. Ancelotti ha convencido al club de que no puede estar toda la temporada con Rüdiger y Militao como únicos centrales de la plantilla tras comprobar contra el Alavés que el rol de Jesús Vallejo debe ser residual.
David Alaba se destrozó la rodilla izquierda el pasado 17 de diciembre. Mañana hará nueve meses de una lesión que puede marcar los últimos años de su carrera, porque además de romperse el ligamento cruzado también quedaron afectados tanto el menisco como algunos tendones. El austriaco eligió operarse en Innsbruck a manos del doctor Christian Fink, un especialista en ese tipo de lesiones al que Alaba conocía perfectamente.
Pasaron los meses pero Alaba no evolucionaba bien. En mayo, seis meses después de romperse el ligamento, apenas había progresado. Era incapaz de subir escalones y la rodilla estaba inestable, así que tuvo que someterse a una segunda cirugía para evaluar el estado de la rodilla. La segunda operación provocaba un retraso en la recuperación de Alaba, que tardó 255 días en comenzar a correr cuando el tiempo normal para comenzar a hacer carrera continua en una lesión de cruzado oscila entre los 100 y los 120 días (de tres a cuatro meses).
Laporte la opción que más gusta
Si, finalmente, el Real Madrid necesita acudir al mercado de invierno para fichar a un central, el que más gusta en la entidad blanca es Laporte. El central del Al-Nassr es una de las opciones que más agrada al club madridista en caso de que desee reforzar una defensa que a día de hoy solamente tiene a Militao y a Rüdiger como centrales de garantías de la primera plantilla. Vallejo todavía no ha tenido minutos y el canterano Jacobo está en dinámica de primer equipo.
Laporte viene de realizar una Eurocopa prácticamente perfecta con la selección española en Alemania. España salió campeona de Europa y el central español fue titular indiscutible para Luis de la Fuente. A pesar de haberse ido a Arabia Saudí, el ex del Manchester City ha demostrado que mantiene su gran nivel.
Alaba, sin fecha de vuelta
En el Real Madrid nadie quiere fijarse un plazo para el regreso de David Alaba, a pesar de las buenas palabras de Ancelotti cada vez que le preguntan. Es poco probable que el central austriaco regrese antes de noviembre pero el problema no es cuándo volverá Alaba sino cómo. El austriaco ya tiene 32 años y lleva en la élite desde los 19, por lo que regresar tras un año parado no será nada fácil.
Ancelotti, al que las lesiones de rodilla acabaron retirándole del fútbol, sabe perfectamente que el Real Madrid no puede afrontar una temporada con siete títulos en juego y once meses de competición con sólo dos centrales puros en la plantilla, Militao y Rüdiger, porque el resto de las alternativas que tiene en su plantilla son parches.
Tchouaméni será el elegido cuando para jugar de central cuando falte uno de los dos, pero el francés ni sabe ni quiere jugar en ese puesto. El cuarto en discordia será Dani Carvajal, que ya jugó en un par de ocasiones la temporada pasada como central. Cumple por jerarquía y experiencia, pero su falta de estatura es un lastre demasiado pesado en el juego aéreo. Vallejo, que se quedó en la plantilla porque nadie le quiso ni cedido, no es una opción para Ancelotti salvo caso de extrema necesidad. Tampoco en la cantera hay nada que le convenza al técnico italiano.
Por eso Ancelotti ha conseguido el visto bueno del Real Madrid para fichar un central en el mercado invernal si Alaba no vuelve a un nivel suficiente como para ser el tercer central del equipo. No será fácil para el club blanco encontrar un futbolista que pueda dar el nivel para una demarcación tan exigente como la de central y en un equipo como el Real Madrid, que siempre deja a sus defensas demasiado expuestos. Pero el club blanco tiene activado desde hace tiempo su radar para reforzar esa zona del campo.
La traición de Yoro
El elegido era Leny Yoro y el Real Madrid daba por hecho su fichaje el verano pasado. A sus 18 años el central francés suscitaba unanimidad en Valdebebas en cuanto a su calidad, a su potencial y a lo acertado de su contratación. Era un central llamado a marcar una época en el Real Madrid, pero el chico, representado por Jorge Mendes, sucumbió ante la inigualable oferta del Manchester United, que no sólo pagó 75 millones al Lille por un futbolista en su último año de contrato, sino que le multiplicó por cuatro el sueldo que le daba el Madrid.
La marcha de Leny Yoro al United trastocó los planes del Real Madrid, que prefirió no mover ficha en verano a pesar de que había otros centrales de nivel que se ofrecieron al club blanco y que también había excelentes informes sobre algunos de ellos. “Hasta enero hay tiempo para fichar un central… si hiciera falta”, decían en el club. Han bastado media docena de partidos con la misma pareja de centrales para darse cuenta de que la llegada de un central en el mercado de invierno ya es una prioridad para el club blanco.
En la lista de centrales que maneja la Dirección Deportiva del Real Madrid hay nombres de defensas menores de 23 años como los de Mosquera (Valencia), Murillo (Nottingham Forest) o Hato (Ajax), además de algún central veterano que podría llegar a la casa blanca en el mercado invernal para reforzar una demarcación en la que el equipo de Ancelotti está demasiado cojo.
