Nacho Fernández necesita un respiro. Su físico, para ser más exactos, necesita un descanso. El capitán del Real Madrid lleva varios partidos jugando con molestias musculares y la sobrecarga que le dejará fuera del partido contra el Girona, que se celebrará el próximo sábado en el estadio Santiago Bernabéu, ha sido la excusa perfecta para tomarse un reposo y dejar de seguir arriesgando, con la posibilidad de sufrir una lesión muscular que le podía llevar a perderse varias semanas de competición. Un auténtico problema para Ancelotti, ya que la zona central de la defensa está bajo mínimos.
Nacho, que ha visto mermado su rendimiento en los últimos partidos, está jugando con molestias. Forzaba porque no quedaba otra, pero el fantasma de sufrir una lesión muscular estaba muy presente. Demasiado. Por ello, esta sobrecarga le ha llevado a frenar y tomarse un respiro. Podría haber seguido forzando, pero el jugador sabía perfectamente que de hacerlo iba a terminar lesionándose.
El capitán ha jugado 720 de los 790 minutos que se han disputado desde que los blancos disputasen los dieciseisavos de final de la Copa del Rey ante el Arandina en Aranda de Duero. Ocho titularidades seguidas y partidos de enorme exigencia como los dos de la Supercopa, el derbi de Copa contra el Atlético de Madrid o duelos complicados en la Liga como ante el Almería o la salida a Las Palmas. Necesitaba parar sí o sí.
El objetivo de Nacho con este descanso es llegar bien a Leipzig, donde el Real Madrid disputará la ida de los octavos de final de la Champions. El descanso que tendrá ante el Girona este fin de semana le debería dejar pista libre para regresar al centro de la defensa en Alemania.
Tchouaméni y Rüdiger, sin Nacho
Sin Nacho Fernández, la pareja de centrales para el duelo ante el Girona de este próximo fin de semana será la formada por Rüdiger, que, salvo sorpresa, se recuperará para este encuentro, y Tchouaméni. El francés retrocederá en su posición para formar en el centro de la zaga.
Esta no será la primera vez que Tchouaméni y Rüdiger comenzarán un partido como pareja de centrales. Ya lo hicieron ante Osasuna en Liga. Además, también jugaron juntos frente al Alavés, cuando Nacho vio roja directa al inicio de la segunda mitad.
El futuro del capitán
El Real Madrid está encantado con Nacho como capitán del primer equipo y le ha apoyado en los momentos complicados que ha tenido esta temporada. Especialmente tras lo sucedido con Portu, donde es tan cierto que llegó tardísimo como que todo se magnificó en exceso. En ese momento, cuando lo pasó mal, sintió el apoyo de los suyos, de su club.
Nacho finaliza contrato a final de temporada. El 30 de junio, si no renueva, dejará de ser jugador del Real Madrid. Pero al contrario de lo que sucedió el curso pasado, cuando ha reconocido públicamente que se sintió angustiado en algún momento, este curso está tranquilo. ¿El motivo? Sabe que cuando quiera podrá renovar con el conjunto blanco.
Como aseguró en la rueda de prensa previa a la final de la Supercopa de España, cuando quiera renovará por el Real Madrid un año más. Sabe perfectamente que tiene el contrato encima de la mesa y sólo debe reunirse con el presidente para firmarlo. No obstante, no tiene prisa.
Nacho quiere esperar el momento perfecto para decidir si amplía o no su contrato con el Real Madrid. ¿Cuándo llegará este momento? Cuando se siente y escuche qué quiere el club de él y sienta si es importante o no para la próxima temporada. Este curso está siendo capital y capitán, por lo que si nada cambia, todos los caminos conducen a que siga siendo jugador de la entidad madridista.
El quinto ‘One Club Man’
Nacho cumplió un sueño levantando en Riad su primer título como capitán del Real Madrid. Antes cumplió otros muchos, como ganar cinco Champions. Pero por delante tiene un reto tan bonito como selecto. El defensa podría convertirse en el quinto One Club Man de la entidad madridista. Sólo cuatro jugadores lo han conseguido en la historia blanca. Zárraga, Camacho, Chendo y Sanchís. El canterano puede ser el siguiente. De hecho, si él quiere lo será.
Nacho ingresó en las categorías inferiores del Real Madrid el 1 de julio de 2007 para formar parte del Alevín A. Desde ese momento, pasó todos los equipos de La Fábrica hasta llegar al Castilla, donde capitaneó al último primer filial madridista que ascendió a Segunda.
De la mano de Mourinho ascendió al primer equipo y con Ancelotti en su primera etapa se empezó a consagrar. Desde ese momento ha demostrado una profesionalidad y una calidad que siempre le han convertido en un jugador capital dentro de la plantilla. Su profesionalidad y su calidad, esa que muchas veces no destaca y se debería hacer más, siempre le ha permitido tener su sitio en el equipo.
