Las cuentas de Alcaraz para ser número uno

La victoria de Carlos Alcaraz en el Mutua Madrid Open es lo que le faltaba al mundo del tenis para considerar, casi de manera categórica, a su niño prodigio como un futuro número uno. Sin embargo, la explosión de Carlitos obliga a hablar de él en presente y ya permite hacer cuentas sobre cuándo podría llegar a lo más alto del ranking, en un 2022 en el que la irregularidad –por distintos motivos– de los líderes permiten la llegada de un outsider como el murciano.

Alexander Zverev, actual número tres del ranking ATP y opositor desde hace meses al uno, lo expuso públicamente ante los presentes en la Caja Mágica tras caer estrepitosamente ante Alcaraz en la final del Mutua Madrid Open. “Ahora mismo eres el mejor jugador del mundo”, comentaba, sincero, el alemán, quien a continuación reflejaría el sentir del circuito con respecto a Charlie. “Es genial para el tenis ver que tenemos una nueva super estrella que va a ganar muchos Grand Slam y va a ser número uno del mundo”.

Alcaraz aparece en las listas desde este lunes como número seis del ranking ATP. Eso, unido a su segundo puesto en la Race 2022, cada vez más cerca de Nadal, le colocan como favorito a Roland Garros y el resto de torneos que vienen. Y, por tanto, aspirante a un número uno más barato que en otros años y en cuya carrera, Carlos cuenta con el factor de no defender tanto como sus rivales en el tramo inmediato de temporada.

La primera oportunidad de Carlitos para asaltar el uno del ranking ATP reside en un imposible pero que, en plena burbuja de alucine con el murciano, puede llegar a considerarse como real. En caso de que Alcaraz se proclame campeón de Roland Garros y haga lo propio en Wimbledon, el número uno sería suyo con casi total seguridad. Sin embargo, el tenista español nunca ha superado unos cuartos de final de Grand Slam, lo que, unido a la pujanza de Nadal y Djokovic de cara al grande parisino y su inexperiencia en hierba, permiten ser algo más prudentes y lanzar la apuesta hacia delante en el calendario.

Wimbledon, primera oportunidad

Carlos defiende una tercera ronda en Roland Garros y una segunda en Wimbledon, en lo que deberían ser sus próximos compromisos, a la espera de si participa también en un torneo de hierba previo a la cita del All England Club. Con sólo dos encuentros como profesional en la superficie, todo lo que sume Alcaraz en césped puede ser considerado como positivo, pero su juego potente, su dominio del cortado y la volea y una confianza por las nubes le convierten en claro candidato, cuanto menos, a la segunda semana en Londres.

Finalizados Roland Garros y Wimbledon con una buena suma en el bolsillo, Alcaraz podría acercarse o estar incluso en un Top-3 del que ya es más fácil ascender al uno. En los Masters 1000 previos al US Open, Carlos encontrará otro filón para sumar una enorme cantidad de puntos. En 2021, el murciano no participó en Toronto y se quedó en primera ronda en Cincinnati, por lo que todo lo que sume irá al bolsillo en una carrera por el número uno que puede estar en ese momento más caliente que nunca… con Alcaraz como serio aspirante.

El Nº1, más sencillo que nunca

La imposibilidad de Novak Djokovic de jugar todos los torneos del calendario, la lesión costal de Rafa Nadal y los vetos –y lesión– de Daniil Medvedev dejan el número uno de la ATP más barato de los últimos años, así como opciones para tenistas de un segundo escalón al que ya sube Carlos Alcaraz junto con los Zverev, Tsitsipas o Rublev. Todos ellos son aspirantes y de sus próximos meses dependerá el saber quienes continúan en la pelea y qué tenistas se caen por no ser capaces de defender sus puntos de 2021.

La Race 2022 da pistas sobre lo que puede suceder en los próximos meses. Al contrario que el Ranking, donde los jugadores van sustituyendo sus puntos de cada torneo por los de la edición anterior del mismo, en la Race se puede ver la evolución de los tenistas en un año en el que España domina con claridad, con Rafa Nadal como primero con 3.530 puntos, seguido de inmediato por un Alcaraz que con 3.460 está segundo en la parrilla para acabar la temporada –si sigue con esta evolución– en lo más alto del tenis mundial.