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LA UEFA RATIFICA LA SUSPENSIÓN DEL MADRIDISTA EN LA IDA DE OCTAVOS

Ni Carvajal, ni sus compañeros, ni el Madrid entienden la cacicada de la sanción de la UEFA

La ratificada sanción de la UEFA a Dani Carvajal llega en el momento menos oportuno para el Real Madrid. El PSG medirá la fortaleza del último campeón de Europa, que no podrá contar con uno de sus indiscutibles. En Valdebebas pocos esperaban que el máximo organismo europeo diese marcha atrás y dejara al lateral diestro sin castigo, pero no por ello ha dejado de molestar mucho.

El Real Madrid tendrá que tratar de parar a uno de los mejores ataques del mundo sin uno de sus mejores hombres en defensa. Carvajal ha demostrado en los últimos años que si hay algún jugador en el mundo capaz de parar a Neymar, ese es él. Los dos debutaron en Primera división la misma temporada y, desde entonces, han sido protagonistas de duelos individuales de lo más parejos.

La visita del PSG en Champions requiere para los blancos una solidez no mostrada hasta ahora. Es la última bala que queda en el Bernabéu para salvar la temporada. No pasar a la siguiente fase supondrá uno de los mayores fracasos que se recuerdan por Chamartín, no por el hecho de no avanzar a la siguiente ronda, sino por la catastrófica temporada. Y para salvar el match ball Zidane necesita a los mejores y en las mejores condiciones. Y el lateral es uno de ellos.

La ratificación de la sanción ha sentado bastante mal de puertas para dentro y lo califican de «incomprensible». Hasta la fecha no había precedentes de algo parecido. Lo único que se acerca es la penalización que se le impuso también al conjunto madridista en 2010, al forzar los apercibidos la cartulina orquestados de forma directa y descarada desde el banquillo, en mitad del encuentro. Un caso en nada comparable a este.

El Fair-Play de la UEFA, cuestionado

Carvajal vio la amarilla ante el APOEL por supuestamente perder tiempo en un saque de banda. No jugaría ante el Dortmund y quedaría limpio para los octavos. Pero la UEFA ha entrado a expedientarle, cuando nunca antes se había hecho. Por ello no se entiende dicha suspensión por dos partidos.

El artículo 15 del reglamento disciplinario de la UEFA recoge la suspensión de un jugador por forzar una cartulina, pero hasta el momento no se había aplicado. Un ejemplo claro y calcado es el de Gerard Piqué, en febrero de 2016. El internacional español forzó la amarilla en la ida de octavos, donde su equipo ganaba al Arsenal por 0-2, para no jugar la vuelta y pasar limpio a cuartos. El central disputó los 180 minutos de la eliminatoria ante el Atlético de Madrid, sin consecuencias por haber provocado esa amarilla ante el Arsenal. Algo bien distinto al caso del carrilero madridista.