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LOS CAPITANES DEL REAL MADRID AVISAN A LOS JÓVENES

«Si nos vemos ya en Cardiff, igual nos quedamos en Madrid»

  • Miguel Serrano
  • Me confundieron con un joven prodigio pero acabé de periodista. Escribo cosas de deportes y del Real Madrid en OKDIARIO, igual que antes las escribía en Marca. También a veces hablo por la radio y casi siempre sin decir palabrotas. Soy bastante tocapelotas. Perdonen las molestias.

«Si creemos que estamos ya en Cardiff, igual nos quedamos en Madrid». Esa fue la advertencia de los capitanes del Real Madrid, de los que llevan más años y más galones en el vestuario, a los más jóvenes de la plantilla, pasada la euforia posterior al 3-0 ante el Atlético en el Bernabéu.

Futbolistas como Sergio Ramos, Cristiano Ronaldo, Modric y Marcelo no se cansaron de advertir, tanto en público después como en la caseta antes, que la eliminatoria «aún no se ha terminado. Queda el partido del Calderón y si vamos de paseo, sufriremos».

En la zona mixta, los jugadores del Real Madrid repetían como una coletilla el mismo mensaje: «Aún no estamos clasificados, que se lo digan al PSG». Los veteranos habían logrado su misión: convencer a los noveles de que para vender la piel del oso conviene cazarlo antes y el Madrid lo tiene herido de muerte, pero aún se puede llevar un zarpazo.

Es cierto que la plantilla es consciente de que el resultado que consiguió ante el Atlético en el Bernabéu «es espectacular. Lo hubiéramos firmado sin duda antes del partido. Hicimos un partidazo y ahora toca rubricar la clasificación en el Calderón», dice uno de los pesos pesados, uno de esos futbolistas que ya ha levantado un par de Champions de blanco.

Además, los futbolistas del Real Madrid saben que les espera una auténtica encerrona en el Calderón. Lo saben, pero no lo temen. «Hemos jugado en ambientes tan hostiles o más que el Calderón: Dortmund, el Allianz, Old Trafford.. y hemos competido en todos. No nos va a asustar el ambiente del campo del Atlético», aseguran en el vestuario de Valdebebas el día después de poner un pie en la final de Cardiff.

Pero todavía falta poner el otro.