José María Navalón Boya, más conocido como Mari Boya, fue el protagonista inesperado de la presentación en sociedad del Gran Premio de Madrid de Fórmula 1, conocido como Madring. El piloto de Campos Racing, de apenas 21 años, se estrelló durante la exhibición haciendo un derrape en una curva y perdiendo el alerón trasero de su Fórmula 3. El catalán, por fortuna, no dañó más el automóvil y pudo ser reparado casi de inmediato.
En una exhibición en la que también tomó parte Carlos Sainz, el piloto ilerdense tuvo la mala suerte de chocar. Mari Boya, sin embargo, parece estar bien acostumbrado a los espacios reducidos después de que esta temporada cosechase su mejor resultado en el Gran Premio de Mónaco tras ser tercero. Veremos si el piloto de Les consigue algún día pilotar en Ifema en la máxima categoría.