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PRIMERA DIVISIÓN / JORNADA 7

Al Atlético le sale una tarde redonda

Gana en el Sánchez Pizjuán y no cede más puntos sobre la cabeza de la Liga

Marca Llorente tras 47 partidos, Koke supera a Adelardo y, milagro, Savic y Giménez no se lesionan

El Sevilla, deprimido, ofrece una imagen muy pobre y provoca silbidos en la grada

El partido refuerza a Cunha, Witsel como centrocampista y Morata, y pone en el disparadero a Joao

Sevilla – Atlético de Madrid, en directo: resultado, goles y minuto a minuto del partido de Liga Santander hoy

Al Atlético le salió en Sevilla una tarde redonda: ganó en el Pizjuán cuatro años después, Llorente puso fin a una sequía de 47 partidos, Koke superó a Adelardo, Morata prolongó su semana mágica, Oblak dejó la portería a cero y, milagro, Savic y Giménez completaron los 90 minutos sin lesionarse. La victoria permite al equipo no ceder más puntos con respecto a la cabeza, pero quedará poco tiempo para las celebraciones: el martes choque clave en Bélgica ante el Brujas. Toda una final para seguir vivos en la Champions.

El Sevilla, en cambio, incrementó exponencialmente las dudas que ha despertado desde que se inició el Campeonato. El equipo de Lopetegui está en tierra de nadie, sometido a un cambio generacional que le va a costar muchas derrotas y que posiblemente se cobre la cabeza del entrenador porque la grada carece de paciencia. Con Isco muy lejos de su mejor forma y sin demasiados argumentos ofensivos fiables, le queda un largo camino por recorrer antes de recuperar tiempos pasados que, en este caso, sí que fueron mejores. La respuesta sonora del estadio fue suficiente para transmitir una sensación de inseguridad que le aleja de pelear por objetivos claros.

El Atlético salió dispuesto a no hacer prisioneros y ejerció sobre el Sevilla un dominio hegemónico en el arranque del partido. Koke forzó a Bono a mandar a la esquina un centro lateral que se había envenenado, Llorente cabeceó fuera una jugada iniciada por Saúl y Morata tuvo, a los 18 minutos, la mejor ocasión de la tarde en un disparo en el área que mandó alto cuando tenía toda la ventaja para hacer más daño. Con el rival sin más argumentos que la potencia de Dollberg, el choque pintaba muy bien para los de Simeone, al que se veía satisfecho en la banda.

Lopetegui, en cambio, era un mar de dudas, impotente para darle respuesta al Atlético y obligado además a hacer movimientos inesperados. A los 28 minutos Rekik, lesionado, le dejó su puesto a Alex Telles y al brasileño no le había dado tiempo a ni a dar dos pasos cuando se encontró frente a frente con Llorente, que había recibido un pase de Koke tras una pérdida del Sevilla en un saque de banda. El madrileño tomó el balón, adquirió el espacio suficiente y remató cruzado dentro del área al fondo de la red. 47 partidos después el internacional volvió a celebrar un gol. En el mejor momento posible.

Desorientado, el Sevilla se hundió en picado tras el 0-1. Morata remató alto en el área pequeña a los 31 minutos y Llorente le pegó al lateral de la red en el 32. El Atlético había olido sangre y se había ido directo hacia arriba con el objetivo de sentenciar el partido y evitarse complicaciones. A los 36 minutos, tras el rechace de una falta, Isco dispuso de la primera oportunidad de respuesta por parte de los hispalenses, pero su volea se marchó muy alta.

El remate del malagueño no supuso ningún problema para Oblak, pero la consecuencia fue que el Atlético decidió que había llegado el momento de ser algo más prudente y se amansó. El equipo dio un paso atrás con el objetivo de alcanzar sin más tribulaciones la primera parte con el tesoro que suponía el gol de Llorente. Por delante quedaba un segundo tiempo en el que el Sevilla estaría obligado a arriesgar y, en consecuencia, sería posible encontrar más espacios.

Como era de esperar Lopetegui tiró de veteranía para responder al 0-1. Rakitic y Navas aparecieron después del descanso reemplazando a Salas y Delaney. Una apuesta arriesgada, pero era de las pocas opciones que le quedaba al entrenador guipuzcoano tras una primera parte de oscuridad completa. Simeone, por supuesto, no tocó absolutamente nada. Esta vez no era necesario. Al menos de momento.

El partido pareció virar porque al Atlético le surgieron dudas por la posición de Navas, que soltó un centro desde la derecha al que no llegó por poco Dollberg. Se encendieron las alarmas en el banquillo rojiblanco, pero cuando Griezmann y Carrasco estaban ya preparados para  cambiar el rumbo, el Sevilla cometió un nuevo error letal y Morata, tras recibir de Cunha, que le había robado el balón a Carmona, prolongó su semana mágica con una vaselina sobre Bono que enmudeció el estadio y dobló la ventaja rojiblanca en el por instante posible para el Sevilla.

El rosario de oportunidades de las que dispuso el Atlético a partir de ahí fue enorme. Cunha, Carrasco, Correa, Griezmann en varias ocasiones…con el Sevilla totalmente roto, los rojiblancos se encontraron al contragolpe con una autopista a su disposición pero ninguno de ellos estuvo acertado y al final tuvo que aparecer Oblak con un paradón ante El-Nesyri para evitar sorpresas y mantener a buen recaudo los dos goles de ventaja, que al final resultaron suficientes.

El partido refuerza a muchos jugadores, especialmente al brasileño Cunha, novedad en la banda izquierda, a Llorente, a Witsel, por supuesto como centrocampista, e incluso a Nahuel, que sin brillar sí que es cierto que mejoró su nivel habitual, aunque acabó lesionado. La otra cara de la moneda fue Joao, al que el Cholo sacó al campo en el minuto 85 en un día clave para el equipo.  No sólo fue intrascendente en ese ratito, sino que además se ganó una tarjeta amarilla. Como lleva sucediendo desde que está en el Atlético, el portugués pierde el gas a las primeras de cambio y cada vez es más prescindible. Tanto en la la Liga como en su selección.