Comunidad de vecinos

Si la comunidad de vecinos no te deja tener perro esto te interesa: lo que dice la ley sobre las mascotas

Perro en la comunidad de vecinos
Perro.
Janire Manzanas
  • Janire Manzanas
  • Graduada en Marketing y experta en Marketing Digital. Redactora en OK Diario. Experta en curiosidades, mascotas, consumo y Lotería de Navidad.

Aunque no existe una normativa específica sobre perros en comunidades de vecinos, su regulación es necesaria para garantizar la convivencia ante el creciente número de mascotas en los hogares españoles. Los perros son las mascotas más comunes, presentes en aproximadamente el 40 % de los hogares en España, según datos de la ANFAAC.

Dentro de las normas de convivencia de una comunidad, pueden especificarse ciertas cuestiones críticas relacionadas con las mascotas, como su presencia en zonas comunes. Los problemas más comunes suelen estar relacionados con el ruido, como los ladridos constantes a horas inoportunas, que pueden generar conflictos entre vecinos.

Perros en la comunidad de vecinos

La Ley de Propiedad Horizontal se centra en el uso de las zonas comunes y el respeto a los derechos de los vecinos, estableciendo las normas de convivencia en las comunidades de propietarios. Permite acotar determinadas actividades mediante acuerdos y mayorías específicas, con el principal objetivo de garantizar la pacífica convivencia de todos los vecinos.

El artículo 7.2 LPH señala que «al propietario y al ocupante del piso o local no les está permitido desarrollar en él o en el resto del inmueble actividades prohibidas en los estatutos, que resulten dañosas para la finca o que contravengan las disposiciones generales sobre actividades molestas, insalubres, nocivas, peligrosas o ilícitas».

Aunque la Ley de Propiedad Horizontal no establece límites concretos en lo que respecta a la tenencia de mascotas, permite delimitar ciertos aspectos cuando los derechos de lo demás se ven afectados, especialmente en las zonas comunes. Asimismo, se puede intervenir cuando se produzcan ruidos o molestias dentro de la vivienda que afecten al resto de vecinos.

Por otro lado, la Ley de Bienestar Animal también se ha convertido en una norma fundamental en lo que a la convivencia con mascotas en viviendas se refiere, detallando varios aspectos relacionados con su presencia en comunidades de vecinos.

  • Es obligatorio evitar que los animales depositen sus excrementos y orines en lugares de paso habitual de otras personas, como fachadas, puertas o entradas a establecimientos, y se debe proceder a la retirada o limpieza de estos con productos biodegradables.
  • La norma también prohíbe expresamente dejar sin supervisión a cualquier animal de compañía durante más de tres días consecutivos; en el caso de los perros, este plazo no podrá ser superior a 24 horas consecutivas.
  • Además, se prohíbe expresamente «mantener de forma habitual a perros y gatos en terrazas, balcones, azoteas, trasteros, sótanos, patios y similares o vehículos.» Sin embargo, excepto prohibición expresa, se puede mantener a la mascota en la terraza, azotea o patio, pero no de forma permanente.
  • La ley especifica que los propietarios de animales deben evitar ruidos generados por sus mascotas que puedan molestar al resto de vecinos. Asimismo, insta a los dueños a «adoptar las medidas necesarias para evitar que su tenencia o circulación ocasione molestias, peligros, amenazas o daños a las personas, otros animales o a las cosas».

En resumen, la comunidad de vecinos no te puede impedir que tengas un perro u otra mascota en tu vivienda. Sin embargo, sí se puede limitar el uso que estos hagan de las zonas comunes. Para ello, es necesario consultar los estatutos de la comunidad de propietarios.

Ahora bien, tu mascota provoca daños o problemas, un vecino o la propia comunidad podrían demandarte, solicitando una indemnización, la reparación del daño o el cese de la molestia causada.

Normas

Si bien los estatutos de la comunidad de propietarios no pueden prohibir la tenencia de un perro dentro de tu vivienda, sí pueden limitar su presencia en áreas comunes como ascensores y jardines. Esta prohibición debe ser aprobada por la mayoría de los miembros en una junta de propietarios y no puede discriminar razas específicas.

Por lo tanto comunidad de propietarios puede prohibir o limitar la presencia de perros en jardines comunitarios. Si no hay una prohibición específica, tu mascota podría pasear en estas zonas, pero es importante respetar a los demás vecinos y evitar que haga sus necesidades en el jardín.

En lo que respecta a perros sueltos en zonas comunes, la libertad de movimiento de tu mascota sin correa dependerá de lo que establezcan los estatutos de la comunidad. Salvo una prohibición expresa, no hay nada que lo impida, aunque siempre es recomendable utilizar el sentido común y mantener a tu mascota sujeta para evitar cualquier tipo de problema.

El ruido provocado por mascotas, especialmente los ladridos de perros, es uno de los problemas más frecuentes en las comunidades de propietarios. Aunque la comunidad no puede prohibirte tener mascotas legales, sí puede demandarte si tus animales causan molestias.

Finalmente, recuerda que es tu responsabilidad como dueño mantener controlado a tu perro y evitar que cause molestias al resto de los vecinos. Además, si tu mascota causa desperfectos en las zonas comunes, debes repararlos. Lo mismo aplica para la suciedad o excrementos que el perro pueda dejar: es tu deber limpiarlos.

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