¿Para qué sirve bostezar?
Si usas lentillas de colores en Halloween debes saberlo: los oftalmólogos piden que no te las pongas
El secreto mejor guardado de Gaudí, la obra desconocida que esconde un mensaje oculto
Levantarte un lunes por la mañana para ir a trabajar puede llegar a ser más complicado que cualquier otra cosa en el mundo. La comodidad de tu cama te atrapa y seguramente darías cualquier cosa por pasar cinco minutos más acurrucado entre las sábanas. El sueño se acaba, sales de tu nido de confort y mientras estás lavándote la cara frente al espejo algo sucede: el bostezo. Pero, ¿por qué bostezamos? Científicamente no ha podido demostrarse que el hecho de estar cansado o aburrido esté completamente relacionado con bostezar. No existe ninguna evidencia de que este acto intuitivo del cuerpo se deba a ningún factor en concreto, lo que esta claro es que bostezamos, algunos más que otros, y por eso vamos a intentar desenmarañar este secreto biológico.
Distintas hipótesis
Bostezar es un gesto corporal que siempre ha atraído mucho a la comunidad científica. Un estímulo natural basado en la apertura bucal seguida de una lenta inhalación de oxigeno y la posterior exhalación del mismo. Las primeras hipótesis basan este hecho en un reflejo de las vías respiratorias involuntarias que sirve para regular el dióxido de carbono y los niveles de oxígeno en sangre. Un acto perfectamente controlado por los nervios y con base en la columna vertebral.
La relación con el cansancio o el aburrimiento está basada en que la respiración en estos casos es superficial, por lo que el sistema cardiovascular se altera y transporta escasas dosis de oxígeno a nuestros pulmones. Al bostezar, el cuerpo se pone en alerta y el oxígeno entra de forma inmediata a los pulmones y por tanto la sangre liberando así el dióxido de carbono sobrante. Es decir, bostezar sirve para regular la circulación de oxigeno en sangre.
El contagio
A todos nos ha pasado, estás tranquilamente en una parada de autobús con tus 8 horas de sueño recién cumplidas y una vitalidad que no tenías en años viendo a un transeúnte bostezar, y sí, «se te pega». De momento esta es otra de las incógnitas que la ciencia no ha podido solucionar y que se relaciona principalmente con la teoría de sugestión.
Por el momento se desconocen muchas cosas acerca de los bostezos, lo que si es seguro es que durante la lectura de este artículo seguramente hayas tenido la obligación de regular alguna que otra vez el oxígeno en tu sangre (bostezar). Lo sentimos, el contagio es inevitable.
- Temas:
- Ciencia
- Cuerpo humano
Lo último en Curiosidades
- 
                            
                                Si usas lentillas de colores en Halloween debes saberlo: los oftalmólogos piden que no te las pongas 
- 
                            
                                El secreto mejor guardado de Gaudí, la obra desconocida que esconde un mensaje oculto 
- 
                            
                                Así debes usar el vinagre de manzana para reducir arrugas y líneas de expresión de forma natural y conseguir resultados visibles 
- 
                            
                                Adiós al mayor mito de los cazadores españoles: un estudio científico desmiente todo lo que se creía hasta ahora 
- 
                            
                                Aviso de la NASA a España: confirman que no estamos preparados para lo que llega a partir de 2026 
Últimas noticias
- 
                        
                            El padre de Lamine Yamal y la reflexión de Pipi sobre su influencia 
- 
                        
                            Si Dior quiere 
- 
                        
                            Trump afirma que aún no se ha tomado ninguna decisión sobre ataques en Venezuela 
- 
                        
                            Prisión para el joven que apuñaló a otro para robarle en el pueblo de Sineu en Mallorca 
- 
                        
                            Qué es el enfriador del aceite de un coche, para qué sirve y cómo saber si está roto