El nombre de Barcelona sigue siendo un enigma: este es su origen

El origen del nombre de Barcelona sigue siendo un enigma, aunque existen varias teorías que nos revelan un origen casi mitológico. La ciudad que se ha convertido en una de las más pobladas y visitadas de España data de hace miles de años con la llegada de los primeros pobladores.

A partir de un origen que es casi legendario, aunque quizás más antiguo de lo que se cree, este centro neurálgico ha ido incrementando su peso y poder en esta zona de España y de Europa. Toma nota del motivo por el que Barcelona se llama así.

El enigma del nombre de Barcelona

Las ciudades suelen tener un origen que forma parte de su historia más lejana, un fundador y un motivo que las impulsa a llamarse de esta determinada manera. Es como las personas, siempre hay alguien, ya sea de la familia o los propios padres junto con sus experiencias vitales que impulsan a elegir un nombre.

No es casualidad que la mayoría de las ciudades se llamen de esta manera, sino más bien todo lo contrario. Tienen un origen, una teoría que ha sido comprobada por los historiadores y que lleva a todo el mundo a denominar esa ciudad de esta manera en concreto. Pero, cuando nos remontamos a ciudades que tienen una historia tan antigua como Barcelona la situación se complica.

Es más difícil encontrar esas fuentes que dan con un origen cierto y comprobado. En este caso partimos de la parte contraria de la historia. Es decir, tenemos el nombre, pero no el origen. Por lo que la historia se construye al revés. Se buscan esas coincidencias históricas que podrían estar detrás del nombre de Barcelona como tal, una técnica peligrosa y hasta con algunos problemas.

Saber el origen real de este nombre puede ya ser imposible, ante la ausencia de pruebas documentales de lo que ha pasado o de la forma en la que se formó esa ciudad que ha acabado siendo el centro de todo un territorio. Existen varias teorías que podrían haber dado lugar a esa Barcelona como ciudad, a ese nombre que todos conocemos. Alguna de ellas será la cierta, pero saber con total seguridad cuál será, quizás acabe siendo un poco complicado. Toma nota del motivo por el que Barcelona tiene este curioso nombre.

Este es el origen de este hombre

La mitología y las leyendas atribuyen a la formación de Barcelona al mismísimo Hércules, un semidios, hijo de Zeus y de una humana, que llegaría a las costas del Mediterráneo para establecer esta ciudad. Algo que quizás no sea 100% verdad, pero así lo dice una inscripción que podemos leer en el Ayuntamiento de Barcelona.

Según esta leyenda llegaría con la barca número nueve, es decir ‘barca nona’ que podría haber dado lugar a este curioso nombre que hace referencia al número de barcas que transportaban a este semidios y a su sequito en busca de alguna de sus batallas míticas. Hércules no es el único implicado en el nombre de Barcelona.

La siguiente teoría se remonta a las Guerras Púnicas, afectaron a cartagineses y romanos, siendo la península Ibérica uno de los escenarios por los que los cartagineses transitaron. De camino a una Roma que plantaba cara a través de sus provincias. Si seguimos esta teoría, Amílcar Barca, el padre de Aníbal, podría haber sido el fundador de Barcelona, de él recogió su nombre que fue adaptado en femenino para definir a este punto del país.

Un museo de Copenhague ha complicado aún más este origen incierto del nombre de Barcelona ya que tiene una moneda en la que aparece el nombre de Barkeno. Data de los iberos los primeros pobladores de la península ibérica y cuyo nombre podría traducirse por ‘la que tiene más vegetales o plantas’. Una forma de complicar el verdadero origen de una ciudad que parece que se ha forjado con el paso de los años.

Dando lugar a una ciudad que difícilmente podremos saber de dónde viene, podremos conocer su historia más reciente, pero quizás no, ese primer día en el que los humanos se establecieron en ella y empezaron a crear una comunidad.

Podemos tomar como buena alguna de las tres teorías, ya sea un origen ibero, mitológico o cartaginés, en cualquier caso, se ha convertido en un lugar que ha dado nombre a toda una provincia y que es un referente mundial. Habrán pasado ya varios miles de años y quizás en una sociedad ibera de la que quedan pocos datos o en busca de una historia como la mitológica de Hércules que se creía hijo de un Dios, es complicado de poder establecer un nexo en común. Encontrar las pistas que nos lleven a ese origen es un gran enigma que pocos se han atrevido a establecer.