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Ni en bolsas ni en el congelador: el sencillo truco para que los mangos no se pongan malos en casa

  • Ana López Vera
  • Máster en Periodismo Deportivo. Pasé por medios como Diario AS y ABC de Sevilla. También colaboré con la Real Federación de Fútbol Andaluza.

El mango es una fruta tropical originaria de Asia, aunque ya se ha popularizado por todo el mundo. Se caracteriza por tener una pulpa jugosa y dulce, de color amarillo-anaranjado.

Su textura suave y fibrosa lo convierte en un ingrediente perfecto para postres, batidos o consumo directo, pero mantenerlo en condiciones óptimas puede resultar complicado si no se aplican técnicas adecuadas de conservación.

Su piel varía entre verde, amarillo y rojo. Es rico en vitaminas A y C, y fibra, además de poseer propiedades antioxidantes y ayudar en la digestión.

La correcta maduración y almacenamiento no sólo preserva su dulzura y jugosidad, sino que también evita desperdicios y garantiza que cada bocado conserve sus nutrientes esenciales. ¿Quieres saber cómo puedes conservar esta fruta con un método sencillo?

El truco infalible de Frutas Marol para conservar mangos frescos

Según informa la creadora de @Frutasmarol en un vídeo de Instagram, la técnica para conservar los mangos consiste en poner los que están más maduros en el frutero porque son los que se van a comer antes.

«Pongo el resto en la nevera para que me aguanten más. Son madurados en el árbol y no van a perder su sabor metiéndolos en el frigorífico. Así consigo que estén perfectos cada vez que lo vamos a comer», explica.

Este método simple se basa en clasificar los mangos por madurez: los maduros se consumen de inmediato, mientras que los que todavía están verdes se refrigeran, garantizando frescura y sabor sin complicaciones.

Cómo almacenar mangos correctamente, según el Consejo Nacional del Mango

El Consejo Nacional del Mango es una entidad que asesora sobre el manejo y conservación de esta fruta. Los especialistas explican que el mango continúa madurando tras su cosecha, por lo que el almacenamiento adecuado es clave para conservarlo.

Según estos expertos, si el mango está verde, debe mantenerse a temperatura ambiente durante unos días para que desarrolle su dulzura característica. En ese punto, las bolsas de papel tienen su función: ayudan a acelerar la maduración al concentrar el gas etileno que libera la fruta.

No obstante, una vez que el mango alcanza la textura y el aroma deseados, el frigorífico se convierte en el mejor aliado. Guardado entero, puede conservarse hasta 5 días sin perder sus cualidades.

Para períodos más largos, el Consejo Nacional del Mango recomienda pelar y cortar la fruta en cubos, guardándolos en recipientes herméticos dentro del congelador. Éste es útil cuando se busca conservar el mango durante meses: troceado y bien sellado, puede durar hasta medio año sin que se altere su sabor.

Propiedades y beneficios del mango: una fruta tropical llena de nutrientes

Además de su inconfundible sabor, el mango es rico en vitamina C, A y antioxidantes, que refuerzan el sistema inmunitario y favorecen la salud de la piel. Su alto contenido en fibra también contribuye a una digestión equilibrada.

Comprender las fases de maduración y aplicar técnicas de conservación adecuadas no sólo evita el desperdicio alimentario, sino que también garantiza que esta fruta tropical conserve todo su encanto natural durante más tiempo.