Que 2024 ha sido el año de Balenciaga, es un hecho. Hacemos un repaso cronológico. Primero llegó el lanzamiento de la serie documental Cristóbal Balenciaga, un repaso por los entresijos más ignorados y desconocidos de la vida del diseñador de moda. Seguido, la actriz Carey Mulligan nos demostraba por qué es un icono de la moda deslumbrando en los Óscar con un diseño de los años 50 de Balenciaga de cuerpo sirena y escote corazón. Después, en los desfiles de Balenciaga de Alta Costura otoño-invierno volvieron a verse las siluetas y las mangas propias de los códigos propios del diseñador de moda. Y, para cerrar el año, el Radisson Collection Hotel, Gran Vía Bilbao y el Museo Cristóbal Balenciaga le han brindado todo un homenaje.
El lobby del Radisson Collection Hotel ha cedido su espacio a la fotografía de Manuel Outumuro con obras de distintos formatos que revelan la esencia del trabajo de Balenciaga; además, el triestrellado chef Eneko Atxa ha creado un menú en honor al diseñador que se puede degustar en su restaurante Eneko Basque Bilbao que está dentro del hotel.
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Tributo en su origen
Obstinado, único, obsesionado con la perfección. Cristóbal Balenciaga era, en definitiva, un artista. Hoy la obra de su vida se recoge en una icónica exposición del Radisson Collection Hotel, Gran Vía Bilbao, donde su origen rinde tributo a la gran estrella entre costuras a través de la exposición Mirar y pensar Balenciaga. En ella se repasa, a través de fotografías de Manuel Outumuro.
La muestra en Bilbao, disponible hasta el próximo 22 de diciembre, recoge fotografías realizadas a modelos originales de Cristóbal Balenciaga entre 1935 y 1968, que hoy forman parte de la obra expuesta en el Museo Cristóbal Balenciaga. Toda una interpretación de Outumuro sobre las creaciones de Balenciaga, donde el fotógrafo muestra desde su punto de vista los volúmenes, las siluetas y el mundo cromático propio de sus colecciones. Casi de forma cronológica, a través de esta colección se aprecian los diferentes periodos de Balenciaga. Así, las fotografías reflejan cómo sus influencias parisinas y la perfección del patronaje se abren paso entre cada una de las puntadas de las piezas.
La exposición no es todo lo que este hotel en Bilbao, el Radisson Collection, ha creado en torno al gran modista. De la mano del gran chef de tres estrellas Michelin Eneko Atxa nace un auténtico homenaje gastronómico, donde la alta costura pasa al marco de la alta cocina. Cristobal, así se llama el menú, ofrece una experiencia gastronómica compuesta por cinco pasos: Getaria, Belleza, Volumen y forma, La tela y Getaria – París – Getaria. Completado con una selección de cócteles elaborados con la intención de homenajear la obra de uno de los mayores creadores del siglo XX.
Genio entre costuras en Bilbao
Balenciaga no ha pasado a la historia por ser uno más en el universo de la moda. De hecho, nunca quiso conformarse con eso. Pese a su humilde origen, con un padre pescador y una madre modista de Getaria, su talento y perseverancia le valieron la denominación de genio, de maestro. Y le llevaron a consolidarse como uno de los perfiles más influyentes del mundo de la Alta Costura. Lanzó su primera colección en 1937, concediendo una entrevista en The Times que hoy abre el primer capítulo de la serie que repasa su vida Cristóbal Balenciaga.
En su taller, sus patrones dibujaban perfiles creados para seguir el contorno del cuerpo. Dando lugar a colecciones configuradas casi como obras de arte morfológicas, donde las siluetas y los volúmenes se consolidaron como el sello de la casa. Por su taller pasaron jóvenes artistas como Christian Dior, Givenchy y Oscar De la Renta, y otros de la altura de Coco Chanel, fueron auténticos admiradores del modisto español.
