Un vecino se encara a unos ladrones en Valencia: «¡Ya está bien, iros a vuestro país a robar!»

Representan las dos caras de la misma moneda de la catástrofe, un vecino se enfrenta a los ladrones que están saqueando un supermercado en Valencia aprovechando la situación de caos que ha generado a su paso la DANA. El vecino les increpa intentando evitar que sigan robando: «¡Ya está bien, iros a vuestro país a robar!». «¡Os lo estáis llevando todo!», responde el vecino a las excusas que le dan los ladrones mientras saquean el establecimiento ayudados de carros de la compra.

«Qué fuerte me parece, que chusma, que gentuza», gritan los vecinos indignados. «Están sacando carros llenos de jamones y de cerveza», dicen otros, mientras asisten impotentes al saqueo de este supermercado de la cadena Aldi en Valencia por parte de un grupo de hombres y. mujeres de origen extranjero.

No han esperado ni un minuto, desde los primeros momentos de la llegada de la DANA decenas de saqueadores se han lanzado a robar en comercios, coches y viviendas de las víctimas del temporal. La peor parte se la han llevado los comercios de las zonas céntricas de Valencia y Aldaya. La Policía ya ha detenido a 39 ladrones, varios menores entre ellos, por saquear comercios en la zona.

El saqueo ha sido especialmente cruento en un centro comercial de Aldaya, donde la Policía ha detenido a varios de los ladrones que han entrado a robar, pero son decenas los comercios que han visto sus escaparates rotos por los ladrones o reventadas las persianas metálicas de los cierres. Los agentes han conseguido recuperar parte de botín de los saqueadores que no han parado de robar desde que se sintieron los primeros efectos de la DANA en Valencia.

Los ladrones, algunos organizados y la mayoría oportunistas, no esperaron mucho para salir a robar tras sentir los primeros efectos de la DANA en las poblaciones de Valencia. Los sistemas de alarma dejaron de funcionar en cuanto se fue la luz y la cobertura telefónica y muchas zonas quedaron aisladas sin apoyo policial. Ese fue el disparo de salida para que decenas de ladrones salieran a robar aprovechando que policías y guardias civiles se volcaban en socorrer a los miles de víctimas atrapados por el brutal temporal.