Ciencia
Medusas

¿Cómo se pueden reducir las medusas en las costas?

Reducir la población de medusas en las costas es un desafío complejo que requiere la colaboración entre científicos, autoridades, pescadores y comunidades locales.

Carabelas portuguesas en nuestras playas

Medusas con la picadura más peligrosa

Playas españolas con más medusas

  • Francisco María
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La proliferación masiva de medusas no solo afecta el equilibrio de los ecosistemas marinos, sino que también tiene consecuencias negativas en sectores económicos clave como la pesca y el turismo. Además, representan un riesgo para la salud pública, ya que sus picaduras pueden ocasionar complicaciones médicas.

Pese a todo, las medusas son una parte esencial del ecosistema marino. En algunos lugares del mundo, la gente paga por la oportunidad de nadar entre ellas. Sus propiedades están siendo cada vez más investigadas y aprovechadas en áreas como la biomedicina, la nutrición y la cosmética.

Las medusas

Las medusas son organismos planctónicos que habitan principalmente en aguas marinas, aunque algunas especies también se encuentran en agua dulce. Su cuerpo es sencillo y se compone de una estructura en forma de campana llamada umbrela, la cual alberga su estómago y gónadas.

De esta campana parten los tentáculos. Estos seres pertenecen al grupo de los cnidarios. Estos se caracterizan por tener células urticantes llamadas cnidocistos, que contienen uno de los venenos más potentes en el reino animal.

Las medusas viven en enjambres. Esto, además de ayudarles a reproducirse, les ofrece una mayor defensa ante depredadores y mejora su capacidad para capturar presas. Estos enjambres pueden alcanzar densidades notables, llegando a más de 10 medusas por metro cúbico, especialmente en las especies de mayor tamaño.

El veneno de las medusas varía según la especie. En las costas atlánticas y mediterráneas, la carabela portuguesa es la más peligrosa. Sus largos tentáculos y poderoso veneno pueden causar dolor intenso e incluso reacciones alérgicas severas, especialmente en personas vulnerables como niños y ancianos.

Efectos negativos

Las medusas ejercen una presión significativa en los ecosistemas marinos, ya que compiten directamente por el alimento con especies de interés pesquero. Esta competencia afecta especialmente a las larvas y peces jóvenes, que no solo ven reducidas sus posibilidades de supervivencia debido a la falta de alimento, sino que también pueden ser depredadas por las medusas.

Algunas especies de medusas tienen la capacidad de devorar hasta diez juveniles de peces por hora, lo que intensifica el problema. En varias zonas costeras, como Alaska, Namibia y el Mar del Norte, las proliferaciones de medusas han impactado negativamente en las poblaciones de peces, afectando también a las economías locales.

La proliferación

La contaminación favorece la proliferación de medusas. Esto se debe a que el exceso de nutrientes en el agua de mar provoca una mayor floración de fitoplancton, lo cual, a su vez, reduce el oxígeno disponible. Aunque estos niveles de oxígeno son insuficientes para la supervivencia de muchos peces, las medusas pueden tolerarlos, por lo que salen beneficiadas en ambientes degradados.

El cambio climático afecta a las medusas de manera variable, dependiendo de la especie y la ubicación geográfica. En las especies con fases vitales complejas, el aumento de la temperatura adelanta la primavera, provocando que los pólipos liberen las larvas antes de lo habitual.

Como consecuencia, se produce una mayor proliferación de estos animales. Así mismo, el ensanchamiento de los trópicos permite que especies tropicales invadan zonas anteriormente templadas.

¿Por qué están aumentando las medusas?

Cambios en el medio ambiente

Uno de los factores más significativos que ha contribuido al aumento de las poblaciones de medusas es el cambio climático. El calentamiento global ha provocado un aumento en las temperaturas del agua, lo que favorece la reproducción y el crecimiento de estas criaturas. Además, las aguas más cálidas pueden ampliar el rango geográfico donde las medusas pueden prosperar.

Sobrepesca

La sobrepesca de especies que son depredadores naturales de las medusas, como las tortugas marinas y algunos peces, ha llevado a un aumento en sus poblaciones. Al eliminar a estos depredadores, las medusas encuentran menos obstáculos para reproducirse y colonizar áreas costeras.

Eutrofización

El aumento en el uso de fertilizantes en la agricultura ha provocado la eutrofización de muchas aguas costeras. Este fenómeno, que se produce cuando hay un exceso de nutrientes en el agua, puede generar algas nocivas que, al descomponerse, consumen oxígeno y crean zonas muertas donde solo las medusas pueden sobrevivir.

Alteraciones en los hábitats

Las actividades humanas, como la construcción de puertos, la urbanización costera y la contaminación, han alterado los hábitats marinos. Estas modificaciones pueden crear ambientes más favorables para las medusas, lo que les permite proliferar sin competencia significativa.

Regular y conservar

A pesar de su importancia ecológica, muchas personas ven a las medusas como una molestia. Sin embargo, estas criaturas ocupan un lugar clave en la cadena trófica, ya que actúan como depredadores de organismos más pequeños y como presas para depredadores más grandes como tiburones y atunes.

En lugar de eliminarlas, lo importante es entender que su presencia no siempre indica un desequilibrio en el ecosistema. Si su número aumenta desproporcionadamente, es necesario cuestionarse sobre cuáles son las razones detrás de ese fenómeno, como la contaminación o el calentamiento global.

Si hay medusas en la playa, se suelen colocar banderas para advertir a los bañistas. La bandera amarilla indica que se puede nadar con precaución, mientras que la roja señala la prohibición del baño. En algunas zonas también se utilizan banderas blancas con dibujos de medusas para señalar su presencia.

Lecturas recomendadas

Campaña contra medusas

Impacto proliferaciones de medusas