Bebés
Cuidados del bebé

Los mejores consejos para las madres primerizas

Las mejores pautas para hacer frente el ser madre primeriza y también para cuidar de forma adecuada al bebé.

5 miedos habituales entre las madres primerizas

5 consejos para madres primerizas

Charlas imprescindibles para mamás primerizas

Recomendaciones basicas para madres primerizas

Es bien sabido que ser madre es el trabajo más difícil y hermoso del mundo. Sin embargo , cuando se es madre primeriza, hay muchas cosas para las que puedes sentirte vulnerable y no preparada , especialmente en las primeras semanas después del parto. De hecho, durante los primeros días tu cuerpo está muy cansado y los cambios hormonales pueden afectar fuertemente tu estado de ánimo. Descubramos a continuación, los mejores consejos para madres primerizas tanto en lo que respecta a ti misma como para el cuidado del bebé.

Consejos para madres primerizas

Para ayudarte hemos querido redactar una pequeña guía con 10 consejos para madres primerizas y otros tantos que tiene que ver con el cuidado del bebé . ¿Estás lista? ¡Empecemos!

Duerme

Como se mencionó, vienes de una experiencia de gran estrés y dolor, aunque sea por una razón maravillosa: tu pequeña criatura. Es absolutamente natural sentirse cansada y agotada . Ahora, además, también hay que ser más precavida porque de ti depende un poco la vida. Debes poder descansar para afrontar todas las tareas futuras sin sucumbir. No será fácil, pero tendrás que acostumbrarte. Debes intentar dormir cada 3 horas para recargar las pilas.

No pasa nada por sentirte triste

Sentirse triste o deprimida después de dar a luz es absolutamente común , no es necesario que te alarmes. Tu cuerpo y tu cabeza han pasado por cambios importantes, es normal experimentar esta sensación. Pasará. Lo importante es dar rienda suelta a las emociones, si sientes que tienes que llorar, hazlo.

En caso de que este sentimiento continúe por mucho tiempo, es bueno hablar con tu médico o psicólogo.

Pide ayuda 

Nadie tiene éxito solo. Especialmente ahora que te sientes cansada, sin energía, tal vez incluso triste y que tienes que empezar tu nuevo trabajo como madre… ¡pide ayuda! Ahora ya no eres solo una mujer con sus compromisos y deberes, también eres mamá y ¡el maratón acaba de empezar! No seas demasiado escrupulosa al pedir ayuda a tu pareja o familia. Verás que estarán ahí para ti.

No te preocupes por el peso

Volver a estar en forma después del parto no es fácil ni rápido. Definitivamente, la solución no es quedarse estancado de inmediato, al contrario, ahora mismo necesitas recuperar fuerzas a través de una dieta saludable.

El consejo es bajar de peso gradualmente recuperando hábitos saludables de alimentación y haciendo ejercicio. También esto para tomarlo con moderación y tal vez para compartirlo con el bebé: ¡un agradable paseo por el parque todas las mañanas sería bueno para los dos!

Acostumbra a tu pequeño a la rutina 

Las nuevas madres como tú a menudo se preocupan demasiado por cosas como los ruidos en la casa o el exceso de luz. En realidad es importante que el bebé se familiarice con todo esto , en el primer mes empieza a entender el ciclo luz/oscuridad y por tanto a asociar el sueño y la vigilia a las dos fases.

No lo vistas excesivamente

La temperatura de la casa siempre debe rondar los 20-22º con un enterito de algodón completo que cubra los pies es más que suficiente.

Para comprender si el bebé tiene frío, solo verifica el estado de las manos y los pies y, si es necesario, puedes intervenir con una manta. En cambio, si el cuello y la cabeza están sudorosos, entonces el bebé siente calor y hay que tener cuidado de no taparlo demasiado.

Atención a dormir juntos

Dar la bienvenida a tu bebé en el lecho es sin duda un gran placer y, a veces, incluso una conveniencia para intervenir más rápidamente. Sin embargo, no debes subestimar los posibles riesgos: si te quedas dormida, corres el riesgo de aplastarlo o asfixiarlo mientras duerme. Además, al hacerlo, podría acostumbrarse demasiado a su cama y conducir al rechazo de su cuna.

Escucha al pediatra

Escuchar los consejos de abuelas, amigas, familiares que ya han tenido experiencias de crianza es acertado y ayuda a evaluar aspectos que quizás no hayas tomado en consideración. Sin embargo , la persona a quien debes dirigir todas tus dudas y preguntas es al pediatra . Es la figura más cualificada y experta en la materia.

No olvides además escuchar tus propios instintos de madre.

¿Bañas al bebé a diario?

Este tema es ampliamente debatido. Unos responden positivamente, otros negativamente recomendando un máximo de 3 baños a la semana para no debilitar las defensas naturales del recién nacido. Sin embargo, las dos corrientes de pensamiento coinciden en un aspecto: la duración no debe superar los 10 minutos .

Disfruta de tu hijo

¡El último consejo es también el más importante! ¡Estos momentos con tu bebé nunca volverán a suceder! Sácales el máximo partido. Darle todo el amor que puedas es uno de los mejores momentos de tu vida. ¡Disfruta al máximo de esta nueva etapa!

Consejos madres primerizas: Cuidados del bebé

Al margen de los cuidados o consejos que te hemos dado para que el cuidado del bebé no te suponga un mayor estrés, queremos añadir más consejos que tienen que ver con el cuidado de tu bebé.

Ser madre primeriza no es fácil. Y es que no sólo no se tiene al alcance toda la información necesaria sobre el cuidado del bebé sino que, además, la inexperiencia hace pecar de cautela y proteger en exceso al niño. Por eso no es de extrañar que las mujeres que se estrenan en el rol de mamás puedan cometer de vez en cuando algún error que otro.

Para evitar esto, a continuación, enumeramos unos cuantos consejos que seguro que les son de gran utilidad.

Consejos madres primerizas: Otros errores a evitar 

Además de todos los expuestos, es necesario que las madres primerizas pongan todo de su parte para evitar caer en otros errores frecuentes. En concreto, deben seguir estos consejos:

Otro de los errores que deben evitarse por parte de las madres primerizas es el de no hacerle caso al médico. Así, aunque los “entendidos” de la familia se lo aconsejen, el profesional es el doctor y es el que conoce más todos los aspectos que irán a favor de la salud del bebé.