Bebés
Psicología

4 formas de diferenciar entre recompensa y soborno a los niños

La recompensa es algo positivo para premiar al niño, mientras que el soborno es algo negativo para conseguir que el niño se porte bien.

La recompensa y el soborno son tácticas de crianza a las que muchos padres recurren y aunque ambas son efectivas debemos saber diferenciarlas ya que si las usamos, en realidad existe un riesgo que con una de ellas estemos haciendo algo que podría ser negativo para el niño o niña. Veamos entonces 4 formas de diferenciar entre recompensa y soborno a los niños.

4 formas de diferenciar entre recompensa y soborno a los niños

Si bien «recompensa» y «soborno» son palabras que se usan indistintamente y se consideran incluso «gemelas», hay un mundo de diferencia entre ellas y es fácil de entender el porqué. En realidad, la recompensa es una táctica de crianza positiva,  mientras que el soborno es negativo y debe evitarse por completo.

Pero sí es cierto que dependiendo de la situación se puede llegar a pensar que lo que le ofrecemos al niño a cambio de algo que queremos que hagan es un «premio» o una recompensa cuando en realidad, no deja de ser un «soborno». Por ello veamos punto por punto cómo diferenciar ambos conceptos.

  1. Las recompensas se ofrecen para reconocer el buen comportamiento. Por ejemplo, si el niño ha hecho bien todos los deberes o ha limpiado bien su habitación, puedes recompensarlo. Sin embargo, se ofrece un soborno para detener el mal comportamiento. Por ejemplo, si le dices a tu hijo que deje de hacer algo y le ofreces chocolate, es un soborno y no una recompensa dado de que en realidad estás «comprando» al niño o niña para poder obtener lo que quieres de su comportamiento.
  2. Las recompensas también pueden ser sorpresas. Si le consigues a tu hijo algún juguete en una tienda porque te gusta hacerlo o porque crees que se lo merece es una recompensa. En cambio, si le compras un juguete porque están haciendo un escándalo en una tienda , será un soborno.
  3. Si te sientes feliz y positivo por darle un regalo a su hijo, es una recompensa. Si le estás dando algo a tu hijo o hija con estrés y desesperación porque no sabe qué más hacer, no es más que un soborno.
  4. Si tu hijo o hija se siente feliz y orgulloso de recibir un regalo, entonces es una recompensa. Además, dar una recompensa es una decisión de los padres y no es negociable. Por otro lado, si el niño o niña viene y os dice que ha limpiado la habitación y pide más tiempo frente a la pantalla, es un soborno.