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Mallorca se lanza a la pesca sin límites del cangrejo azul para combatir esta especie invasora

Amplía los utensilios autorizados para su captura que sólo no se permitirá en espacios protegidos

Desde que se detectó por primera vez en s’Albufera en 2017 este depredador no ha parado de extenderse

  • Indalecio Ribelles
  • Redactor de OKBaleares, información local de Palma, social y política. Antes, redactor en EL MUNDO/ Baleares durante 20 años.

El Departamento de Medio Ambiente, Medio Rural y Deportes del Consell de Mallorca ha aprobado una resolución que elimina las limitaciones territoriales y permite la captura del cangrejo azul en todas las aguas insulares de Mallorca, excepto en zonas de espacios naturales protegidos, y amplía los utensilios permitidos para el control de esta especie invasora.

El Servicio de Caza ha actualizado la normativa que permite actuar de manera más eficiente y adaptada a la distribución real de este cangrejo. De este modo, se alarga la vigencia hasta el 2030 para combatir la proliferación del cangrejo azul Callinectes sapidus, especie con carácter invasor que amenaza los ecosistemas acuáticos de Mallorca. La normativa, que actualiza y refuerza el marco regulador para el control del cangrejo azul en Mallorca, entrará en vigor el 1 de enero de 2026.

Esta especie invasora se detectó por primera vez en s’Albufera en 2017 y, desde entonces, no ha parado de extenderse a numerosos puntos de la isla, como la Gola, el torrente de Canyamel, Porto Cristo o el torrente de Sant Jordi en Pollença.

El vicepresidente segundo y consejero de Medio Ambiente, Medio Rural y Deportes, Pedro Bestard, ha destacado que «esta resolución refuerza nuestro compromiso con la protección del medio natural y nos permite actuar de manera más amplia y eficaz contra la proliferación del cangrejo azul».

Se trata, ha explicado Bestard, de «responder a la necesidad de ampliar y hacer más eficiente el control ante la proliferación de una especie altamente adaptativa y depredadora».

La normativa elimina la limitación de las once zonas autorizadas y se permite el control del cangrejo azul en todas las aguas insulares de Mallorca donde se puede practicar la pesca fluvial.

En el caso de los espacios naturales protegidos, esta actividad sólo se puede llevar a cabo si se cumple la normativa propia de cada espacio y se dispone de la autorización del órgano gestor competente, para garantizar que el control del cangrejo azul sea compatible con la conservación de los valores naturales que motivan la protección del espacio.

Además, se amplían de manera significativa los utensilios permitidos para el control del cangrejo azul. Con la nueva regulación, se permite emplear caña, lienza, salabre o pinzas como utensilios principales de pesca, con un máximo de dos utensilios activos por persona. Con las limitaciones que existían hasta ahora, se reducía mucho la capacidad de actuación de los pescadores y hacía más difícil capturar cangrejos.

«Esta ampliación ofrece más opciones y mayor eficacia a la hora de capturar ejemplares, permite adaptar mejor las técnicas según el tipo de curso de agua y facilita la participación ciudadana en la gestión de esta especie», ha remarcado el consejero de Medio Ambiente.

1.000 pescadores autorizados

El balance de los primeros cinco años del programa de control del cangrejo azul demuestra que esta iniciativa ha sido una herramienta eficaz y sostenible.

Entre 2020 y 2024, más de mil pescadores autorizados han participado en el seguimiento y extracción de ejemplares en toda la isla, con cerca de 15.000 capturas registradas.

El programa ha contado con la colaboración activa de la Universitat de les Illes Balears (UIB), que ha analizado los datos recogidos por el Servicio de Caza del Consell de Mallorca y ha publicado un artículo científico. Una de las conclusiones es que la pesca recreativa regulada puede ser una herramienta útil y efectiva para contribuir al control del cangrejo azul.

Al respecto, el consejero Bestard ha subrayado que «la colaboración con la comunidad científica y, especialmente, con la UIB es esencial para tomar decisiones fundamentadas y avanzar en una gestión ambiental rigurosa y eficaz».