Andalucía
Desaparecidos

La Policía cree que la madre del menor de Morón quería hacer el Camino de Santiago para resucitarlo

El menor de 13 años de Morón de la Frontera (Sevilla) desaparecido hace casi dos años murió en el pueblo y su madre pensó que resucitaría llevándolo a Galicia en una suerte de Camino de Santiago. Es la conclusión a la que ha llegado la Policía Nacional en un informe de de julio de 2022 de la Sección de Análisis de Conducta de la Unidad de Inteligencia Criminal.

La madre viajaba con el menor desde Morón a Galicia cuando pidió ayuda desde una carretera de Segovia afirmando que había matado a su hijo, con un 91% de discapacidad, y arrojado su cuerpo a las afueras de Madrid, en un contenedor de basura de la A-5, junto a su silla de ruedas. La pista del pequeño se perdió en un hotel de Talavera de la Reina (Toledo). En sus posteriores versiones también diría que el menor «se le murió» de fiebre en casa. La mujer fue ingresada en dos centros psiquiátricos y posteriormente quedó en libertad provisional por orden del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción nº 2 de Morón.

Ahora la Policía plantea la hipótesis de que el menor muriese en Morón, que su madre lo llevase consigo bajo la creencia de que iba «a resucitar» y que ocultase el cadáver por «miedo a las consecuencias penales». En dicho informe, dos especialistas exponen que el testimonio de la madre del menor presenta «características de credibilidad bastantes» para deducir los siguientes «aspectos».

Según consideran entre tales aspectos, la mujer, en tratamiento psiquiátrico, habría renunciado a su propia medicación, lo que habría derivado en el «inicio de la sintomatología delirante» atribuida a esta persona.

Otro de los aspectos deducidos del análisis de su testimonio es que el estado de salud de su hijo habría «empeorado» durante la semana del 6 al 12 de septiembre de 2021, extremo respecto al cual la mujer «tiene la certeza de que fallece en su domicilio durante esos días», pero con la «creencia» de que iba a «resucitar sano», motivo por el cual «huye del domicilio, no avisa de su fallecimiento, le lleva comida y ropa y tira los medicamentos»

Ya en el hotel de Talavera de la Reina donde recaló, según este informe, la madre del menor desaparecido habría «tomado conciencia de que su hijo no iba a resucitar» y de que sus conductas podían ser «constitutivas de delito». El «miedo a las consecuencias penales» le habría llevado a «deshacerse del cadáver», sin que sea posible «determinar» si ella «redujo la medicación de su hijo o la retiró totalmente».

«La descripción de los lugares en los que abandona el cadáver de su hijo, la silla y los reposabrazos, reúne las características de la recuperación de un recuerdo y no de un relato inventado», añade el citado informe.

Detalles del caso

El asunto gira en torno a un matrimonio de Morón con dos hijos a su cargo, una joven de 18 años y un adolescente de entonces 13 años que padece una discapacidad física. La pareja se habría separado y la mujer contaba al comienzo de la separación con la custodia de los dos hijos.

En ese contexto, en septiembre de 2021 agentes de la Guardia Civil localizaban a la mujer en una carretera de la provincia de Segovia donde habría detenido su coche, «desorientada» y manifestando declaraciones «inconexas» a los funcionarios. La mujer habría relatado a los agentes que llevaba consigo a su hijo y que le habría matado, deshaciéndose después del cuerpo.

A cuenta del estado de la mujer, que presentaría alteraciones mentales, fue trasladada al centro psiquiátrico del hospital de Segovia para recibir asistencia especializada, contactando la Guardia Civil con el padre del menor y ex pareja de la mujer para interesarse por el paradero del chico.

Desde Morón, el padre y la hermana del muchacho habrían manifestado a los agentes que pensaban que el chico estaba con su madre, siendo informados del testimonio de esta mujer. Ante el relato de la madre que apuntaba a que habría matado a su hijo y se habría deshecho del cadáver, el padre del menor acudió a la Comisaría de la Policía Nacional de Morón para formular una denuncia por su desaparición.

Fruto de ello, los agentes de la Policía Nacional de Morón visitaron la vivienda de la mujer, averiguando que la misma se habría desprendido de enseres y se habría marchado llevando al chico con ella. A partir de ahí, y según las pesquisas de los agentes, habrían pasado aquella noche en un hotel de Talavera de la Reina, donde ambos fueron vistos y desde donde habrían proseguido su viaje, siendo después la mujer localizada, ya sola, en la provincia de Segovia.

En cualquier caso, la Policía Nacional mantiene una investigación para localizar al menor y esclarecer la veracidad o no del testimonio inicial de su madre, que después habría asegurado que no mató como tal al chico, sino que «se le murió» y después se deshizo del cadáver, siendo localizado en un contenedor de Morón «relativamente cerca del domicilio de la madre» el teléfono móvil del muchacho con la pantalla fracturada. Casi años después, el paradero del menor sigue siendo una incógnita.