Los países más baratos para viajar si tienes poco dinero
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Viajar con poco presupuesto no significa renunciar a experiencias enriquecedoras y memorables, y hay varios países que así lo demuestran. Existen numerosos destinos alrededor del mundo donde puedes disfrutar de una gran variedad de culturas y paisajes sin gastar una fortuna. En estos países, puedes encontrar alojamiento y disfrutar de la deliciosa cocina local por muy poco dinero.
Países en Asia, América Latina y Europa del Este, en concreto, destacan por su accesibilidad para quienes quieren explorar el mundo sin preocuparse por el bolsillo. A continuación, hemos seleccionado dos países de Europa del Este que, aunque han pasado desapercibidos para los viajeros durante mucho tiempo, están ganando en popularidad. Ofrecen la oportunidad de descubrir nuevas culturas y maravillas naturales de una manera económica. Con un poco de planificación y una actitud abierta, viajar barato puede ser una experiencia muy gratificante.
Bulgaria
Sofía, la capital de Bulgaria, cuenta con numerosos monumentos y museos fascinantes, además de vibrante arte urbano y rincones interesantes. La catedral de Alexander Nevsky es su icono más reconocible, pero los frescos de la iglesia de Boyana, Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, son una visita imprescindible.
El monasterio de Rila, también declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, es una visita imprescindible Éste impresionante lugar, lleno de historia y arte, se encuentra en un entorno montañoso cerca del macizo de Rila, donde se encuentra el pico más alto de los Balcanes. Independientemente de la época del año, el monasterio siempre ofrece un espectáculo impresionante.
Plovdiv, la segunda ciudad más grande de Bulgaria, es un lugar encandor. Con su casco histórico de casas coloridas del Renacimiento Búlgaro del siglo XIX, su teatro romano, iglesias y vibrante vida cultural, Plovdiv combina historia, modernidad y el carácter búlgaro. Desde su nombramiento como Capital Cultural Europea en 2019, la ciudad ha ganado aún más popularidad.
Varna, la tercera ciudad más grande del país, ofrece una experiencia diferente con su acceso al Mar Negro. Conocida como la capital del veraneo búlgaro, Varna combina playas con una rica historia y un impresionante museo arqueológico. Desde objetos neolíticos hasta tesoros de la orfebrería antigua, el museo es una visita obligada para los amantes de la historia.
Finalmente, Koprivshtitsa, un pintoresco pueblo de montaña famoso por sus casas del Renacimiento Búlgaro, es otro destino que no debes perderte. Sus casas-museo y calles serpenteantes en un entorno montañoso crean un paisaje único. La carretera que sube desde la estación de tren más cercana es una maravilla en sí misma.
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Rumanía
Bucarest es una ciudad repleta de historia y lugares fascinante. Uno de los imprescindibles en Bucarest es la visita al Palacio del Parlamento, el edificio civil más grande del mundo, con más de 350.000 m². Otro punto de interés es el Ateneo Rumano, cuya bóveda decorada con frescos y sus sillas rojas aterciopeladas transportan a los visitantes a otra época. La plaza de la Revolución y la plaza de la Universidad también merecen una visita, al igual que la librería Carturesti, una de las más bonitas del mundo.
El castillo de Bran, conocido como el castillo de Drácula, es uno de los principales atractivos de Transilvania. Aunque su aspecto tétrico desde lo alto de una roca imponente recuerda a la novela de Bram Stoker, la realidad histórica es diferente. Para conocer el lugar de nacimiento de Vlad Tepes, el verdadero Drácula, debes visitar la encantadora Sighisoara. Esta ciudad, con su centro histórico declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, ofrece unas vistas espectaculares desde la torre del Reloj y callejuelas coloridas que parecen sacadas de un cuento.
Cluj-Napoca es una ciudad bohemia y universitaria, ideal para perderse en sus calles llenas de vida. Conocida como el corazón de Transilvania, esta ciudad cuenta con una rica herencia cultural del antiguo imperio austro-húngaro. Entre los lugares de interés se encuentran la icónica plaza de la Unión, la iglesia de San Miguel, el palacio Bánffy y la catedral ortodoxa de Nuestra Señora de la Asunción.
Brasov es una ciudad rodeada de vegetación, con edificios coloridos y una atmósfera única. Aquí, es común ver osos pardos cerca de la ciudad por la noche. La plaza principal, Sfatului, está llena de terrazas y tiendas, y la Iglesia Negra destaca por su historia. La calle Sforii es una de las más estrechas de Europa y la torre Blanca ofrece unas vistas increíbles de la ciudad.
Para escapar de los lugares turísticos, visita Maramureș y Bucovina en el norte de Rumanía. Maramureș es conocida por sus tradicionales iglesias de madera, mientras que Bucovina destaca por sus monasterios pintados. Ambos lugares ofrecen una experiencia cultural única y son Patrimonio Mundial de la UNESCO.
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