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Netflix

‘Legado’: una serie fallida que intenta ser el ‘Succession’ español

Protagonizada por José Coronado, Belén Cuesta , Diego Martín y Natalia Huarte

Crítica de Legado, el quiero y no puedo ser Succession de Netflix. Una serie fallida creada por Carlos Montero (Élite), Pablo Alén y Breixo Corral. Protagonizada por José Coronado, Belén Cuesta , Diego Martín y Natalia Huarte, la ficción intenta recrear la alta clase social española pero sin acierto. Legado no sabe qué quiere contar, todo en ella es un despropósito; desde unos actores perdidos (cada uno parece estar en una serie diferente), a un tono indefinido y unas tramas tan poco creíbles como aburridas. Toda una lección de cómo no dialogar ni construir personajes y ambientes. Una lástima, teniendo en cuenta que, a priori, el proyecto lo tenía todo para resultar interesante.

Sinopsis

Federico (Jose Coronado) debe retirarse de sus empresas de comunicación para recuperarse de una enfermedad que le tiene dos años al margen. A su vuelta, descubrirá que sus hijos se han convertido en unos desconocidos y están llevando los negocios por un rumbo que él detesta y hará lo inimaginable para que no destrocen su legado. Negocios en juego, una familia lejos de ser perfecta, relaciones sentimentales, triángulos amorosos, conexiones gubernamentales, una entrevista muy controvertida, y la pregunta más importante: ¿hasta dónde estás dispuesto a llegar para proteger tu legado?

Imagen de la serie ‘Legado’ de Netflix.

Datos de producción

Esta nueva serie de El Desorden Crea para Netflix es una creación de Carlos Montero (Respira, ÉLITE), Pablo Alén (Mari(dos), Tres Bodas de Más) y Breixo Corral (Mari(dos), Tres Bodas de Más), que han escrito además los 8 episodios con los que cuenta la serie y que han dirigido Eduardo Chapero-Jackson (ÉLITE, Sky Rojo) y Carlota Pereda (Cerdita, Todas las veces que nos enamoramos).

No se puede retratar el dinero sin dinero

Élite, Los Farad, Un cuento perfecto, Los favoritos de Midas o Gran Reserva son ejemplos de series patrias que han intentado retratar la alta sociedad española pero sin éxito. ¿Por qué? Porque no se ha hecho nunca un ejercicio de investigación real. Se tiende a representar a los ricos como personas, o muy pijas que hablan con una patata en la boca, o como ambiciosos sin medida que hacen la vida imposible a los pobres o como personajes que se manchan las manos para cometer sus fechorías sin entender, que en esas alturas, los ricos mandan y otros ejecutan. Por eso Succession es lo buena que es, porque crea personajes no estereotipados pero que son ricos de cuna, que creen que son buenas personas porque no conocen otra forma de ser. Hay algo íntimo y veraz en la serie de Jesse Armstrong y, sobre todo, nivel de producción. No se puede retratar el dinero sin dinero.

Cuando no se sabe qué contar

Legado se une así a las series españolas que intentan contar los problemas de los ricos y se ha quedado en tierra de nadie. A primera vista, ver las élites de periodismo español como un gigante con pies de barro, sus miserias y cloacas, no es novedoso pero sí apetecible. Pero esta serie, primero, es pudorosa. No explota el contexto que investiga, ni le interesa.

El gran problema de Legado es su insustancialidad, su despiste narrativo y su incapacidad de encontrar una tesis. El tono va desde el culebrón más pueril a la comedia menos graciosa pasando por momentos de thriller sin tensión.

En realidad, Legado es humor involuntario. Si te la tomas en serio, sales huyendo en cinco minutos. Si la ves como una parodia tal vez aguantes media hora.

¿Dónde están los actores?

Ni José Coronado, ni Belén Cuesta o algunos de sus compañeros de esta serie son actores baratos. Es decir, sí han contado con presupuesto para hacer algo digno pero no se ve en pantalla.

Protagonistas de ‘Legado’.

Lo peor de Legado es, sin duda, la dirección de actores. ¿En qué serie está realmente Belén Cuesta? ¿Por qué parece que está en una comedia macabra de bajo presupuesto? Coronado hace lo que puede con unos diálogos inverosímiles y un personaje del que se desconoce su personalidad exacta.