Un ladrón magrebí apuñala a un turista danés en Barcelona para robarle el reloj Rolex
La víctima se resistió al ladrón y recibió una puñalada profunda en el brazo
Le arrebató un Rolex Submariner valorado en más de 20.000 euros
Nuevo ataque de los ladrones de relojes en Barcelona, esta vez el ladrón le asestó una puñalada a un turista danés para arrebatarle un reloj Rolex Submariner valorado en más de 20.000 euros. El turista se resistió y el ladrón le clavó la navaja en el brazo hasta la empuñadura. Se trata, según relató la víctima, de un ladrón de origen magrebí muy violento. De momento no se ha interpuesto denuncia, ni se ha efectuado ninguna detención, aunque los Mossos d’Esquadra ya han identificado a un posible sospechoso.
los hechos tuvieron lugar esta mañana de sábado a primera hora frente al hotel Arts del distrito de Ciutat Vella de Barcelona. Allí, sobre las 7:00 horas de la mañana, los vigilantes de seguridad han encontrado a un hombre sentado en banco, que perdía abundante angre a causa de una puñalada profunda en el brazo, tal y como adelanta ElCaso.ElNacional.Cat
El herido, un turista danés, relató a los vigilantes y luego a los Mossos d’Esquadra que un ladrón magrebí le sorprendió en esa zona de Barcelona y le amenazó con un arma blanca para que le entregara el reloj. Ante unos primeros segundos de vacilación, el ladrón le clavó el cuchillo en el brazo a la víctima y le arrebató el reloj, siempre según su testimonio.
Los servicios de emergencias han prestado auxilio a la víctima en ese lugar de Barcelona en el que ha sido atacado por el ladrón y lo han trasladado al Hospital del Mar en estado grave debido a la pérdida de sangre, aunque no se teme por su vida. Los Mossos d’Esquadra se desplegaron el ese distrito para encontrar al presunto ladrón llegando a identificar a varios sospechosos en la zona. Buscaban al ladrón y el reloj Rolex de más de 20.000 euros que supuestamente se llevó.
La plaga de los ladrones de relojes
Con la llegada de la primavera, las plaga de las bandas de ladrones de relojes de lujo florece en las calles de las grandes ciudades de Europa. Decenas de delincuentes recorren miles de kilómetros hasta Madrid y Barcelona en busca de los Rolex, Audemars Piguet y Patek Philippe que con el buen tiempo lucen sus propietarios a la vista de todos. Células de ladrones napolitanos, argentinos y colombianos desembarcan en los aeropuertos dispuestos a hacer «la campaña» a costa de los ciudadanos españoles.
Si llevan documentación auténtica se alojan en hostales del centro de Madrid o Barcelona. Si sus documentos de identidad son falsos, los ladrones se acomodan en hoteles de cuatro estrellas próximos a los distritos más pudientes de la capital o de la Ciudad Condal.
«Aquí lo importante es el tiempo», apostilla el jefe del grupo policial que lucha contra estos delitos en Madrid, y no es una frase hecha hablando de relojes robados. Los ladrones se toman su tiempo, su objetivo son los ciudadanos de Madrid y saben que la Policía vigila, por eso entran y salen de España por el aeropuerto de Barcelona para intentar evitar el cerco policial.
Todos, salvo las bandas de delincuentes venezolanos. Estos hace tiempo que están instalados en España. Una célula de venezolanos desarticulada por la Policía llegó a dar nueve «palos» en Madrid robando un número similar de relojes en sólo unas semanas.
La caza
El objetivo de todos estos ladrones, como el ladrón de Barcelona, es hacer el mayor botín en el menor tiempo posible antes de regresar a sus países de origen. Se extienden como una plaga silenciosa por los distritos de Salamanca, Chamartín y Centro.
Los ladrones acechan desde sus motos de alquiler las muñecas de sus víctimas cuando estas conducen sus coches por estas zonas. Los delincuentes también pasean cerca de los escaparates de la Milla de Oro ojeando a sus presas o sentados por parejas en las terrazas más caras «marcando» a su objetivo mientras se toman un café.
Estos ladrones tienen una «increíble capacidad» para distinguir los relojes caros en las muñecas de sus presas. Sólo van a por los que estén valorados en más de 30.000 euros. Una vez localizado el objetivo se lo marcan al resto de la banda, hasta hacen fotografías del reloj en la muñeca de la víctima y se la mandan al resto de ladrones.
El método del «motochorro»
A veces se camuflan de repartidores de comida rápida, como otra de las bandas desarticulada por la Policía que arrasó las terrazas del distrito de Salamanca en Madrid. A menudo usan el método del «motochorro», un término latinoamericano con el que se denominan los robos desde motos.
Siempre actúan con violencia. Esa es su especialidad: el robo con violencia. «La violencia que emplean depende de la resistencia de la víctima», apunta el experto policial Juan Miguel Hernández, jefe del grupo Cronos dentro del Grupo Operativo de Investigación Zonal (GOIZ) de Madrid.
Las bandas de venezolanos siempre van con la pistola por delante, nunca han disparado a nadie pero sí han golpeado con ellas a las víctimas. El resto también son violentos, pero los delincuentes argentinos aún más.
El grupo «Cronos»
La plaga de los ladrones de relojes de lujo y su violencia no pasó inadvertida a la Policía de Madrid, y el jefe superior fue pionero en la respuesta policial creando en Madrid el Grupo Cronos, una veintena de policías veteranos preparados para luchar contra este tipo de delincuencia organizada, muy escandalosa, que crea una gran sensación de inseguridad ciudadana.
El primer obstáculo de estos policías es la cantidad de ladrones que llegan desde el extranjero. «Hay varias tipologías, los napolitanos, por ejemplo, si en un primer atraco el reloj es suficientemente valioso (de hasta 500.000 euros en algunos casos), dan por cerrada la campaña, se van a Barcelona en un coche alquilado y salen por el aeropuerto», explica el agente.
Estos especialistas de la Policía son capaces de averiguar la nacionalidad de los ladrones de relojes de lujo simplemente revisando las cámaras de seguridad de la zona. La experiencia previa y la presente les permiten resolver casos hasta en 24 horas. «No nos engañemos, en la mayoría de las ocasiones no se consigue recuperar el reloj, aunque sí encarcelar a los ladrones por una temporada», remacha. A pesar de todo, el Grupo Cronos de la Policía de Madrid ha resuelto el 90% de los cerca de 60 robos violentos de relojes que se han dado en el último año.