Las dos caras del sospechoso de asesinar gais en Bilbao: su futura suegra no da crédito
«No puedo decir nada malo de él», comenta la futura suegra del detenido. El Nelson David del que hablan los periodistas no es el que Mónica -la madre de la novia del chico- conoce. El novio de su hija trabaja con ella desde finales de febrero. Lo define como responsable y trabajador, pero el juez lo ha mandado a prisión porque lo relacionan con un homicidio, dos tentativas y otras tres muertes de varones certificadas como naturales en un principio. Todo ello en Bilbao.
Las víctimas son hombres homosexuales, citados en una página web, a los que drogaba en su casa con éxtasis líquido, doblegando así su voluntad para conseguir las claves y sacarles el dinero. La Policía contaría con numerosos rastros: la documentación y el éxtasis que se dejó en una mochila, grabaciones en cajeros, venta de material robado a las víctimas y la identificación en los intentos de homicidio.
En prisión
El detenido por los presuntos crímenes de Bilbao ingresó en prisión por orden del juez que instruye la causa. El sospechoso, que se entregó el jueves en la comisaría de la Ertzaintza de Irun (Gipuzkoa), ha pasado a primeras horas de este sábado a disposición judicial y horas más tarde ha ingresado en prisión, han confirmado a EFE fuentes del Departamento de Seguridad, que no han facilitado información sobre la cárcel a la que ha sido trasladado.
La Policía vasca investiga seis posibles crímenes en Bilbao, entre ellos un presunto homicidio consumado y dos en grado de tentativa, en relación con el supuesto asesinato de varios hombres en esta ciudad. Por su presunta relación con estos crímenes arrestó a Nelson David M.B., un joven de 25 años nacido en Colombia y sobre quien pesaba una orden de detención dictada por el Juzgado de Instrucción número 6 de Bilbao, que lleva los casos.
La Ertzaintza indaga un presunto homicidio, del que dispone de una prueba «toxicológicamente acreditada», y dos casos de presuntos homicidios en grado de tentativa, más tres fallecimientos que fueron certificados como muertes naturales y que se encuentran en fase de investigación, pero «sin elementos probatorios de ningún tipo», según informó el consejero vasco de Seguridad, Josu Erkoreka.
Según lo conocido hasta ahora de fuentes de la investigación, el presunto autor de los hechos contactaba con sus víctimas a través de una red social de citas para hombres homosexuales, a quienes drogaba y lograba sacarles las claves de sus tarjetas y otros datos bancarios, para después extraer dinero de sus cuentas en cajeros automáticos y realizar transferencias a su nombre.