Sucesos

El incendio de Tenerife calcina casi 3.000 hectáreas y obliga a confinar seis municipios

El incendio forestal que comenzó en la noche del 15 de agosto en el monte de Arafo (Tenerife), afecta ya a más de 2.600 hectáreas de varios municipios de la isla, entre los que se encuentran: Arafo, Candelaria, La Victoria de Acentejo, Santa Úrsula, La Oratova y El Rosario. Todo ello en un perímetro que alcanza los 31 kilómetros y que ha provocado la evacuación y el confinamiento de más de 7.600 personas en las últimas 34 horas. Fernando Clavijo, presidente de Canarias, ha asegurado esta mañana en una rueda de prensa que el incendio de Tenerife es uno de los «más grave» en los últimos 40 años.

Clavijo ha admitido que el trabajo que se está realizando es con «mucha dificultad, pero efectivo», ya que otra de las características que ha citado de este fuego es que está generando unas circunstancias climatológicas «propias», lo que conlleva que las previsiones que se están adoptando para actuar «no sean acertadas». Por ello, ha afirmado que el trabajo de extinción de este jueves «va a ser fundamental» porque a partir del sábado se prevé que la meteorología se complique ante una subida de temperaturas.

En relación con ello, la meteoróloga Vicky Palma ha reconocido que este incendio «nunca» se había visto hasta ahora, ya que llevan «34 horas de convección -propagación de calor u otra magnitud física en un medio fluido por diferencias de densidad-«, llegando las llamas a alcanzar en algunos momentos los «seis kilómetros de altitud», provocando esto el salto de pavesas -partes que quema el fuego a su paso y que salta con fuego para acabar convirtiéndose en ceniza-.

Así, matizó, que las condiciones meteorológicas actuales son «parecidas» a las de ayer, por lo que se pueden seguir «generando problemas como en las últimas horas», ya que se está dando una situación que «no se había visto en el archipiélago en los últimos años».

Noche «Muy complicada»

Por su parte, el responsable técnico Pedro Martín ha comenzado su intervención admitiendo que la noche ha sido «muy complicada» porque «ninguna» de las actuaciones planificadas en los modelos principales han salido adelante.

De todos modos, ha querido exponer como parte positiva que la zona sureste del fuego, hacia los caseríos por encima de Arafo y Candelaria, «no han evolucionado», por lo que «no» ha habido afección a estos caseríos; mientras que en la zona de la dorsal hasta Las Lagunetas «no» ha habido propagaciones y entre Las Lagunetas el trabajo ha sido de protección.

Sin embargo, ha lamentado que se iba a intentar cerrar con quema controlada una vez que el fuego había superado el valle de Igueste pero «no» se pudo porque hubo saltos de paveseo, enfocándose el incendio hacia Barranco Hondo, en El Rosario, llegando alrededor de las 06.00 horas al tendido de Las Raíces, por lo que se ha priorizado el evitar que el incendio pudiera llegar al municipio de El Rosario.

En cuanto a la zona oeste, incide, en que por «inaccesibilidad no se pudo actuar», afirmando que es una parte por donde «avanza» el fuego, aunque «no» tiene combustible, y el objetivo aquí «es encerrarlo donde está».

De todas formas, subrayó que el incendio está generando «bastante paveseo, saltando las zonas alineadas», por lo que esa capacidad de paveseo, que «no estaba prevista», lo que hace «es elevar todo el material que desprende el incendio, con partículas ardiendo y lo coloca en una distancia por detrás de los trabajadores».

Confinamientos

Pedro Martín ha señalado que en algunas zonas el incendio está provocando un paveseo que lanza partículas ardiendo, «por eso se ha decidido el confinamiento» en el casco urbano. El objetivo de este confinamiento, explicó, es que se van a desarrollar trabajos en los que los efectivos y medios necesitan «viabilidad completa» para moverse y que la labor sea «eficaz».

Justifica así este confinamiento que espera «sea temporal» pero incide en que el fin es que el trabajo permita «apagar con la mayor celeridad posible los puntos» que se puedan prender ante el lanzamiento de pavesas.

En total, el incendio forestal de Tenerife ha provocado ya que más de 7.600 personas estén evacuadas o confinadas.

Refuerzos

Por su parte, la presidenta del Cabildo de Tenerife, Rosa Dávila, señaló que se ha procedido al incremento de medios, tanto aéreos como de tierra, con el objetivo de hacer cortafuegos para que no avance hacia La Orotava. el fuego no avance. Así se ha solicitado un refuerzo de efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME), que llegará en la tarde de este jueves a la isla.

En concreto, y según ha informado el Ministerio de Defensa, 92 militares de la UME saldrán desde su base en Morón (Sevilla), con destino Tenerife, para reforzar al equipo que está desplegado en la isla. Con ellos ascienden a 202 los militares del BIEM II que van a estar desplegados en la extinción de este incendio.

El pueblo «cubierto de cenizas»

La alcaldesa de Candelaria (Tenerife), María Concepción Brito, ha pedido este jueves precaución a la población para salir a la calle, ya que el pueblo se encuentra «cubierto de cenizas, de restos de pino quemado, de pino canario que hay por toda esa zona, que es lo que realmente está ardiendo». Por ello, Brito, ha instado a los ciudadanos a que salgan a la calle «lo menos posible», ya que ha señalado que los servicios sanitarios del municipio han tenido que atender a personas, sobre todo mayores, con «algún problema respiratorio, también con alguna irritación ocular».

La alcaldesa de Candelaria ha querido poner en valor el trabajo que está realizando todo el equipo que está luchando contra este fuego porque «literalmente se están jugando la vida porque la intensidad y la virulencia» de este fuego, asegura, «no» la recuerda en su municipio.

Actualmente en lo que se refiere a Candelaria, apuntó que la noche ha transcurrido «más o menos tranquila», ya que afirmó que en el caso de este municipio la «dificultad» se produjo en el momento de generarse el fuego porque prácticamente «no se pudo trabajar» y fueron horas que se dedicaron al «diseño» de toda la estrategia para actuar al amanecer, que fue cuando se pudo actuar con medios terrestres y aéreos.