Sociedad
Serpientes

Una conductora encuentra una serpiente en su coche mientras conducía por la A-4

La mujer paró el coche en el arcén para avisar a las autoridades

Una conductora se encontró una serpiente del maíz en su coche mientras circulaba por la A-4 el pasado viernes en Madrid. La mujer se encontraba conduciendo tranquilamente cuando notó algo entre sus pies y, tras darse cuenta de que era una serpiente de medio metro de longitud, paró en el arcén y avisó a las autoridades. El reptil no pertenecía a la mujer.

Los agentes de la Unidad de Tráfico de la Policía Municipal fueron los primeros en llegar al vehículo y avisaron a los policías de la Patrulla de Medio Ambiente. Según un portavoz de la Policía Municipal de Madrid, en una operación coordinada por varias unidades se rescató con «éxito» a la serpiente, posteriormente identificada como una serpiente del maíz, del interior del vehículo. En concreto intervinieron la Comisaría de Medio Ambiente y la Comisaría de Servicios Especiales. Por el momento, las autoridades están tratando de encontrar al sueño del animal.

Este tipo de serpientes son muy solitarias, y no viven en hoyos, sino en la planicie, en los campos y en las praderas, pues son las mejores áreas donde puede encontrar su alimento, así como protección y escondite si es necesario. Además, estos animales no son conocidos por ser agresivos, sino todo lo contrario. Entre otras cosas, es habitual que este tipo de reptiles busquen zonas de calor, por lo que esto puede explicar por qué se escondió en el interior del coche.

Es una especie invasora

La serpiente del maíz viene de la familia Colubridae. Se le llama así por el patrón que se dibuja en la parte del vientre que recuerda al de una mazorca de maíz ancestral. Es una serpiente solitaria y no vive en hoyos sino en la planicie, y en los campos y praderas, ya que son las mejores áreas para encontrar su alimento, protección y escondite.

Son populares en el mercado de mascotas por ser más pequeñas y dóciles que otras especies de serpientes y por no poseer veneno. Debido a su potencial colonizador y a constituir una amenaza grave para las especies autóctonas, los hábitats o los ecosistemas, esta especie ha sido incluida en el Catálogo Español de Especies Exóticas Invasoras.

La problemática asociada a su introducción se debe a su impacto ecológico, ya que puede depredar sobre insectos, anfibios, reptiles, aves y pequeños mamíferos autóctonos y a su impacto sanitario, como portadora de diversas plagas y enfermedades que pueden afectar a la fauna nativa.

Las principales vías de entrada están en su comercialización como animal de compañía. De hecho, es el colúbrido adquirido como mascota más popular a nivel mundial, o por introducción accidental en containers. Como vectores de introducción están la liberación voluntaria y el escape de ejemplares mantenidos en cautividad.