Sociedad

La 1 de TVE cierra el peor febrero de su historia con una audiencia del 8,7%

El modelo de TVE que han implantado Pedro Sánchez y Pablo Iglesias se podría resumir en una palabra: fiasco. La 1, el principal canal del ente público, ha cerrado el peor febrero de su historia con un 8,7% de share, y se ha quedado a una décima de convertirse en el peor mes histórico, cuya audiencia más baja fue del 8,6%.

Rosa María Mateo afronta la recta final de su mandato como administradora única de RTVE. Y se va a marchar dejando al ente público con las audiencias por los suelos y con una imagen en la que priman el sectarismo y la colocación de amiguetes, como Jesús Cintora, amigo personal de Pablo Iglesias.

La radiografía de la audiencia de La 1 en el mes de febrero es sólo la muestra de la deriva a la que han llevado Sánchez y Iglesias, utilizando TVE con fines políticos. Algo que la audiencia ha penalizado con creces. El mes de febrero de 2021 marca un hito. Se convierte en el peor febrero de la historia con un 8,7% de share, acercándose peligrosamente al peor mes de la historia que registró un 8,6%. El 14 de febrero, el día de las elecciones en Cataluña, La 1 dejó un nuevo récord histórico negativo. Ese día pasará a la historia como el que menos audiencia ha tenido, con un 6,4% de media diaria.

De nada han servido el estreno de dos series nacionales, del programa de Dani Rovira o del reality Maestros de la Costura. La audiencia da la espalda a La 1.

La credibilidad de TVE está más en entredicho que nunca. El asalto socialcomunista a la televisión pública no ha hecho sino empobrecer la oferta televisiva y dejar sonoras muestras de sectarismo, algo que muchos televidentes ya no toleran.

«Leonor se va de España, como su abuelo»

El último y más sonoro escándalo en el que se ha visto envuelto el ente público tuvo que ver con un ataque directo y sectario contra la Casa Real, y más concretamente contra la Princesa de Asturias. Durante ‘La hora de la 1’, mientras se daba la noticia de que Leonor de Borbón se marchaba dos años a Gales a estudiar el bachillerato, la información iba acompañada de un rótulo que decía: «Leonor se va de España, como su abuelo», haciendo referencia a la marcha en agosto del pasado año de Juan Carlos I a los Emiratos acuciado por los escándalos relacionados con sus finanzas.

Hasta la sectaria Rosa María Mateo consideró que se había traspasado una línea roja y decidió poner de patitas en la calle al autor de semejante ataque a la Casa Real. Desde las filas de Podemos se mostraron en desacuerdo con la medida. No consideraban que el rótulo fuera tan ofensivo como para quitar de su puesto al autor del mismo.

«Negro de ultraderecha»

Otro momento cumbre de la televisión pública se produjo, precisamente, el día que La 1 registró su peor día de la historia, coincidiendo con las elecciones de Cataluña. Un tertuliano que participaba en el programa informativo de los comicios catalanes llamó al candidato de Vox, Ignacio Garriga, «negro de ultraderecha». Todo un ejemplo de racismo que, de haberse producido con otro gobierno y con otro mandato al frente de RTVE habría supuesto un terremoto a nivel nacional.

Pero el escritor Bernat Dedéu, al que acompañaban para el análisis político Javier Sardá y Pilar Rahola, mostraba su disgusto porque el primer diputado de color que lideraría un grupo político en el Parlament de Cataluña iba a ser «un negro de ultraderecha».

Dos millones por el programa de Cintora

Jesús Cintora y el vicepresidente del Gobierno, Pablo Iglesias, presumen de ser amigos. De ahí, no es de extrañar que el periodista haya terminado colocado en TVE. El problema es que colocar al amigo de Iglesias en el ente público le ha salido por un pico a los españoles. 60.661 euros por programa, según datos facilitados por la propia Rosa María Mateo en el Congreso de los Diputados. Un pico para los contribuyentes.

Además, Rosa María Mateo, en su respuesta con fecha de entrada en el Congreso el pasado 16 de diciembre, señala que la aportación del ente público a este programa se eleva a 1.377.548 euros por 32 capítulos entre el 16 de noviembre y el 31 de diciembre, como ya informó a Vox en otra respuesta parlamentaria publicada por este periódico. Este «programa magacín», según la administradora única pese a su alto contenido político, y de «producción mixta» ya ha sido renovado para la emisión de más capítulos y sigue actualmente en antena.

No obstante, en esta contestación al PP, Matero sí indica a cuánto asciende la aportación total que hizo TVE al espacio presentado por Jesús Cintora en su primera tanda de emisiones: junto a los 1.377.548 euros previstos para abonar a la empresa externa Lacoproductora SL, una plataforma creada por el empresario José Miguel  Contreras, también habla de 489.997 euros destinados a recursos propios, es decir, del propio ente público, y de 73.633 euros a «recursos ajenos», esto es, a terceros. De este modo, el presupuesto total del programa de Jesús Cintora en su estreno se elevó a 1.941.178 euros, cerca de dos millones.