Los zumos de frutas y las bebidas ligth perjudican la salud

Un estudio desarrollado por el Centro de Investigación Biomédica en Red-Fisiopatología de la Obesidad y Nutrición (CIBEROBN) desvela que los zumos de frutas y las bebidas light perjudican la salud. En concreto se refieren a más de cinco vasos de bebidas edulcoradas o azucaradas, entre las que se encuentran estos dos tipos de bebidas mencionados anteriormente.

El motivo es que consiguen incrementar la hipertensión arterial, la obesidad abdominal, los niveles de triglicéridos en sangre y también disminuyen el colesterol bueno o HDL, lo que se conoce como síndrome metabólico.

Este trabajo se realizó con motivo del informe ‘Prevención con Dieta Mediterránea’ y los resultados aparecen publicados en ‘Journal of Nutrition. Para ello se estudió a casi 2.000 personas de entre 55 y 80 años con un elevado riesgo cardiovascular, pero sin síndrome metabólico.

Los responsables de esta investigación, entre los que se encuentran los doctores Nancy Babio y Jordi Salas-Salvadó, apreciaron como aquellas personas que ingerían más de cinco vasos a la semana de bebidas azucaradas o endulzadas (aunque sin azúcar) presentaban  un 43% y un 74% más riesgo de desarrollar síndrome metabólico, en comparación con la gente que consumía menos de un vaso de estas bebidas.

Se comprobó además que la ingesta de zumos de frutas naturales y envasados guardaban una cierta asociación con el incremento en el riesgo de sufrir con el tiempo este síndrome. En el caso de las bebidas azucaradas demostraron que cuando se tomaban de manera regular y en exceso, las posibilidades de padecer hipertensión y unos niveles bajos de colesterol bueno aumentaban un 9%. Por su parte, con los zumos de frutas naturales y las bebidas light se incrementaba el riesgo de obesidad abdominal.

Después de comprobar las conclusiones de este trabajo, los autores entienden que los zumos de fruta, las bebidas azucaradas o edulcoradas deben colocarse en lo más alto de la pirámide nutricional, aunque sería conveniente que se disminuye su consumo, por lo que recomiendan rebajar esos cinco vasos a la semana.