En verano la piel más protegida que nunca, pero no debemos descuidarla el resto del año

En muchas ocasiones pensamos que sólo debemos proteger nuestra piel del sol los meses de verano, sin embargo, los especialistas alertan de que la protección solar debe aplicarse durante todo el año con el fin de evitar complicaciones dermatológicas que puedan llegar a convertirse en un cáncer de piel. Debemos tener en cuenta que el cáncer de piel es el tipo de cáncer con mayor incidencia en las personas, aunque también es cierto que siguiendo algunos consejos y recomendaciones puede prevenirse.

La dra. María Calvo, jefa de servicio de Dermatología y Medicina Estética de Olympia de Quirónsalud, expone que la «luz solar es una energía electro magnética compuesta por luz ultravioleta, luz visible e infrarroja. A su vez, y esto es importante, debemos saber que la primera se divide en tres bandas: UVA, UVB y UVC; sin embargo, la banda UVA no es filtrada por la capa de ozono igual que la UVB y UVC y, por tanto, penetra a través de las nubes y de los cristales».

Por eso, y «aunque el 80% del daño biológico lo producen las radiaciones UVB, la banda UVA también contribuye a las mutaciones del ADN. Algo que favorece el aumento del riesgo de cáncer de piel y fotoenvejecimiento».

El peso del exposoma: factores ambientales y de exposición a los que estamos sometidos

Otros factores que debemos tener en cuenta es la hora del día en la que nos exponemos al sol y las radiaciones, así como el «exposoma», es decir, «aquellos factores ambientales y de exposición a los que estamos sometidos cada persona». En total, detalla la dra. Calvo, se han descrito hasta siete factores externos que influyen en el envejecimiento de la piel: «La contaminación, el tabaco, la nutrición, la temperatura, el estrés y la falta de sueño».

Ante esta alerta y, sobre todo, información de los especialistas dermatológicos, es fácil de entender que «es importante cuidar nuestra piel durante todo el año donde cabe desde una buena rutina de higiene, hidratación con productos antioxidantes y antipolución hasta una estricta protección solar».

No obstante, y aunque pensamos que la piel tiene «su propio sistema de protección frente a las radiaciones UV», también hay que señalar que «experimenta unos cambios cuando se expone a los mismos para minimizar su daño».

Importante cuidar la piel durante todo el año: limpieza, hidratación y protección

La piel es el órgano más extenso del organismo. La epidermis, la  capa más superficial, es la que nos protege y la que bloquea el paso de la luz UV. «Es la capa donde se absorben la mayoría de las radiaciones UVB, sin embargo la radiación UVA es capaz de penetrar en capas más profundas. Los  melanocitos, son  las células encargadas de producir un pigmento llamado melanina, al estimulares con la radiación solar, este pigmento  oscurece la piel dando lugar al bronceado y proporciona protección natural a cualquier exposición posterior», aclara la dra. Calvo.

Sobre la cantidad de melanina presente en la piel, la especialista comenta que «depende de factores hereditarios y de la exposición solar. Por ejemplo, las pieles rubias y pelirrojas son especialmente sensibles a los efectos de la radiación UV a corto y largo plazo debido a su menor capacidad de síntesis de melanina tras su exposición».

Ante cualquier aparición sospechosa en la piel, acudir al dermatólogo

Sobre la piel, detalla la dra. Calvo que se dice que «es el espejo del alma»; por eso, «hay muchas patologías internas que nos avisan de que algo no está bien manifestándose a través de la piel». En este sentido, alerta de que «debemos acudir al dermatólogo si observamos que hay algún signo de picor, inflamación, lesiones pigmentadas que cambian o que aparecen nuevas».

Cualquier señal puede dar una pista hacia algún problema más grave que en algunas ocasiones se puede coger a tiempo y poner un tratamiento. La dra. Calvo comenta que existen distintos tipos de cáncer de piel, el melanoma y el cáncer de piel no melanoma (carcinomas basocelulares y epidermoides). «Todos ellos se manifiestan en forma de lesiones cutáneas, pero de formas muy variadas (lunares, lesiones rosas, lesiones ulceradas, etc.)», apunta.

Por tanto, insiste la especialista en la observación permanente de nuestra piel porque «cualquier lesión nueva o que cambie consultada nos resulta clave a la hora de hacer un diagnóstico precoz que permita tener un mejor pronóstico».

La piel tiene memoria y el daño acumulado pasa factura

«La periodicidad de las revisiones dermatológicas, dependerá del riesgo individual de cada persona», según la dra. Calvo. Pero, eso sí, como «medida general, se aconseja revisarse una vez al año y siempre que se observen cambios. Normalmente, se revisa la piel mejor antes de que se produzca bronceado de la misma».

Ahora que viene el verano, además, muchos de nosotros nos vamos de vacaciones a la playa, a la montaña, al pueblo. Por tanto, normalmente la exposición solar aumenta sin remedio y somos nosotros de manera individual los que debemos protegernos porque, además, tal como alerta la dra. Calvo, la piel «tiene memoria» y todo el daño previo y acumulado «pasa factura».

«El daño de la piel se va produciendo de manera insidiosa desde que nacemos, con la exposición solar crónica que da lugar a mutaciones en el ADN celular y en los sistemas de reparación del mismo que juegan un papel crucial en el mantenimiento de la integridad del genoma contra agentes responsables del desarrollo tumoral», aclara.

La lucha contra el envejecimiento prematuro

Hacer una estimación del envejecimiento prematuro, indica, «no es fácil», ya que se han «aumentado considerablemente los daños provocados por el exposoma» –citado anteriormente– como la contaminación, el uso del tabaco, una mala nutrición etc), aunque «también es cierto que han evolucionado mucho los conocimientos del mismo y la manera de combatirlo», apunta.

En este camino por luchar contra las patologías dermatológicas que pueden aparecer en el camino de las personas, la dra. Calvo destaca el equipo de expertos dermatólogos, especializados en las patologías cutáneas de Olympia QuirónSalud que ofrecen «unidades específicas centradas en los últimos avances tecnológicos, tanto para el diagnóstico como para el tratamiento de las distintas afecciones de piel».

Además, comenta que cuenta con aparatología para realizar diagnóstico y seguimiento digital de lesiones pigmentadas, inflamatorias y patología capilar. «También ofrece una amplia plataforma láser, con los últimos avances del mercado que permitirá el tratamiento de múltiples lesiones ya sean patología o estética».

A la vanguardia de los tratamientos de cáncer de piel

Sobre las vanguardias alrededor de los tratamientos del cáncer de piel, la dra. Calvo explica que han «evolucionado de manera exponencial en los últimos años con el desarrollo de la inmunoterapia y fármacos diana. Ambos», prosigue, «han permitido cambiar radicalmente el pronóstico sobre todo del melanoma metastásico, para el cual había muy pocas opciones hace unos años».

Con respecto a otros tratamientos más cosméticos y farmacológicos, la especialista aclara que «manchas cutáneas existen de muchos tipos, y es fundamental saber reconocerlas y diferenciar las que pueden producir un problema para la salud, de las que son meramente un problema estético».

No aplicar producto despigmentante sin consultar con un especialista

Por eso, alerta, «es fundamental contar con la consulta de un dermatólogo que pueda hacer un diagnóstico correcto y recomendar el tratamiento correcto. Nunca se debería aplicar ningún producto despigmentante sin consultar con un especialista».

No obstante, y este consejo va para todos los segmentos de la población, «sin duda alguna» el mejor tratamiento antiedad para la piel es «llevar protector solar todos los días del año para hacer un adecuado filtro de la radiación UV crónica, es lo que más va a prevenir a nuestra piel de un fotoenvejecimeitno crónico».